Vientre de alquiler para el magnates comprometido
pensando lo
stras vidas y así salir de es
r madre, los niñ
el din
nocencia se perdió dándole espacio a una mujer que respira y vive por conseguir dinero, con pocas oportunidades y una vaga educación, lo máximo que
die pues hasta cierto punto aunque está enamorada también vive amargada por las oportunidades que no ha tenido, sin padre ni madre y la dureza de la ca
e que no q
quero más importante de esta ciudad, 9 meses Hellen- toma su rostro y mir
gunta absolutame
que tanto quieren esas ilustres familias no llega ni llegará porque la tipa está seca, un vientre de alquiler es la última opción pues adoptar a un niño no es posible, ellos
, yo seré el vientre de alquiler- toma la decisión- mis problemas de dinero se deben acabar, despué
O CA
s a su empleado- lo hizo
rsona que no está dispuesta a agachar la cabeza ante nadie, la bonita castaña saluda y una vez a solas y con los exámenes que demuestran que es una mu
iene por tener a menos por supuesto que asegu
da- contraataca borrando la sonrisa malic
lón de
las manos en la me
millones y firmas ahora mismo que r
uilidad y firmando el contrato sin nervios- no debe preocuparse lo di
James viendo cómo Hellen no se parece en nada a su hija- crecerá en mi cuerpo, pero si me pregunta p
conocer a
n que ella debe ser una desconocida para todos, mientras que Sandra confía ciegamente en las indicac
e la recibe mientras Hellen está de esp
está B
ñorita- mira la coleta alta de la mujer que luce un vestido negro largo ceñido al cuerpo, una chaqueta jeans y zap
para tu bebé, Hellen, ella es mi hija, Sandra Smith- la prese
eza- eres joven y hermosa- la mira admirando
sirve pues no puedo ser madre- dice afligida- sin embargo aún así tendré un bebé- toma las mano
algo nerviosa- soy la
puede creer a quien ve- ¿La loca de la bi
las manos de Sandra y se cruza de bra
amor, ella es Hellen, ella será la mujer qu
ble, olvídate, está mujer no será la madre de mi hijo, una
stúpido- y tú eres una imprudente, altanera y ladrona, yo te iba a dar el dinero no era necesario que lo quites y te largues- se acerca con el mismo desafío, sacánd
jo a un tarado como tú- mira los oj
rabioso- no hay marcha atrás, Sandra eligió a Hellen y eso se respeta, tu-