Dos Corazones, Un destino

m, sentía que algo se le escapaba. Algo importante. La forma en que los niños se entendían, la similitud en sus gestos y comportamientos, lo desconcertaban

escuela, Ethan se encontró en su oficina, pensando en

hard interrumpió

a reunión con la señorita Hart esta tarde.

ción. Sabía que esta conver

mos a aclarar las cosa

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la. Había organizado la reunión con el pretexto de hablar sobre Liam, aunque en real

vestía una blusa color crema que resaltaba su piel, y una falda azul oscura. Al entrar, su mirada se cruzó con la de Et

dijo Ethan mientras se acercaba a la mesa. Su tono era más serio que

tgomery. ¿De qué

detenidamente. Había algo en su presencia que le re

rdad es que hay algo extraño en la forma en que se entienden. Es...

Ella sabía que los niños se llevaban bien, pero n

n poco incómoda-. Los dos se cuidan el uno al otro.

como si no estuviera co

ay algo más. Algo más profundo, más... familiar. -

. Su corazón comenzó a latir con más fuerza. Había algo en la forma en que Ethan lo dec

una buena amistad, señor Mont

ante, su mirada se suavizó un poco, per

-Pausó un momento, buscando las palabras ad

egunta directa. Sabía que era inevitable que alguien lo preguntara

n de criar a Noah por su cuenta, sin involucrar a su familia, y mucho menos a un hombre del pasado que ya no fo

uesta a decir más, y eso lo desconcertó aún más. Pero decidió no presionarla

parece

ceño, sin entender a

raño?

u silla, cruzando los

ir, son tan parecidos. No solo en su manera de ser, sino en sus rasgos. Es casi como si fueran

iendo que un escalofrío recorriera su espalda. Sin embargo,

inguna relación de sangre. -Su tono sonó firme, pero en su interior comenzó a

perder la oportunidad de pr

cias, hasta en su apariencia, pero que tú sigas diciendo que

esponder. Sus propios pensamientos se entrelazaban, y aunque había tratado de ignorar

-A pesar de sus palabras, su voz sonaba menos segura de lo que ell

ensión en su postura, pero no insistió. Ella estaba escondiendo algo, eso era evidente

de su silla, rompiendo el silenc

me. -Ella estaba lista para salir de la sala, pero antes de que

tado si tal vez los dos niños est

, como si buscara una respuesta que no podía encontrar. S

encio, sintiendo que finalmente había tocado algo