Un sueño de Amor

a, cansada, harta, no me refería a algo físico, sino mental, era la

aún era una pequeña adolescente, dejandome a cargo de mi hermana menor, quien a penas solo tenía meses, tuvimos que huir de California ya qu

ente que cualquiera, pero mejor

iguo jefe, quien habia muerto hace un mes, siendo su único heredero s

de los Michel se llamaba Ruben, era amable,

spota, antipático, sin educación, no conservaba ninguna mujer, ninguna

2 café, el desayuno de Adrián, la cartera y como siempre andaba mal vestida, pobre,desteñida, per

o el hombre entregándome el monton

a la empresa Michell, no puedo con

stos momentos no

ue fa

aba por cruzar la calle cuando mi teléfono sonó e

pude meti la mano en mi cartera y log

chell, estoy un poco retrasa

una hora de retraso, son las ocho

oy e

es diez minutos para est

nadie iba a detenerse si parecía la loca de los gato

a empresa estaba sudando a mares, el vigila

expreso la recepcionista quien era una

sta?—pregunte toman

l, extraño al difunto señ

que yo

ina, subi el ascensor el cual parec

por mi escritorio lanzando la cartera, qu

a que era imposible, camine con cierto recelo y entre a

coloque el café y desayuno

inutos te d

ñor

vase que contenía café, el cual voló por los

a, no es mi culpa que tenga que lavar su

jiste? —

e lo sien

eno conmigo, me pagaba horas extra y tambien me ayudaba con las factur

to, las cosas tiene que cambiar, yo no soy mi papa a mi no me vas a convencer

on como platos ¿qu

e usted cree —respondi

las cuentas de mi padre, te pagaba mas d

por mi rostro, nunca nadie me

pero el fuera más rapido y tomo mis manos para controlarme, nuestras miradas

or primera vez en mi vida cedi, caí en las garras de un hombre experto, con una boca perfecta, sua

i una bofetada, el en ningún momento intento detenerme nuevamente, solo dijo las palabras

pedida—Sol

adre fue un hombre ejemplar, jamas me falto el

gunto sin ningún tipo de

dable, narcisista y un ególatra, nunca mas se le ocurra toc

er que encontraba mi padre tan atractivo

rda! —grite dan

de furia, agarre un jarrón y lo regente con mis propias manos, lo c

ldit

ex jefe salio de su ofi

de la empresa—miro mis manos las cu

su pañuelo, pero no lo

ldito jarrón.

censor, pero justo cuando las puertas s

y—su

tras las puertas

uien enviaba flores para disculparme por cada mujer con la que dormía, yo llevaba su ropa a la tintor

a oscuro y pensó que era un gato, cosa que era mentira puesto que el sabia mi horar

a una cena, obviamente esa noche descubrí su maldad, cuando cpm clara intención me empujo

n, estaba única, total e irremediablemente