AQUELLA NOCHE CON EL CEO

e sus celos estúpidos, pues ya tenía 10 minutos aproximadamente esperando a que este saliera y nada que lo hacía, se levantó de

crédula y pensaba que su novio Daniel era un pan de Dios, luego de encontrarse en la ca

ero al parecer el destino quería que se quedara allí y v

ano y se movía de tras del taxi casi que corriendo pe

erando se aproximaba un taxi a lo

rro sus cosas y se acercó muy rápido al taxi, abrió la puerta trasera y se montó, al montarse le sonrió a este–

r, al tener su teléfono en la mano miro hacia la ventana y vio como su novio Daniel salía en su automóvil, no parecía

lada hasta donde sea que vaya! Hoy descubr

para así comenzarlo a seguir sin que este se diera cuenta, Claudia Martinez saco

ir todo, realmente me siento muy

jos se veía una chica la cual el rostro ya era conocido para Claudia, pues está también estudiaba en la misma empresa

estido muy corto y pegado vinotinto la cual al ver el carro de Daniel detenerse sonrió y de una vez llevo sus manos hasta la manilla de el automóvil, abrió la p

ándose en el auto de su pareja e

menzaron a llenarse de lágrimas las cuales seguidamente comenzaron a caer de sus hermosos ojos–, ah

no podía permitirse perderlo de vista ni un segundo, esté sabía lo tan

ntentaba ver de quién se trataba no podía ya que se encontraba este taxi algo lejos de él, rápidamente para despistarlos a

si lograr alca

y luego de esto a cruzar por distintos lugare

nserió no podemos perderlo, necesito saber y confir

cuenta de que después de cruzar ya el automóvi

el auto al que seguíamos al parecer de

la mirada y vio en dónde se encontraban, pues estaban cerca del restaurante Charme, este era muy popular en P

e! Si no se equivoca mi intuició

que está quería pues, ese era su trabajo. Minutos después este lentamente comenzó

que sucedió le cobraré 20 euros, disculpe perder de vist

ctual novio y su compañera de trabajo se bajaban agarrados de las manos y caminaban hacia la entrada de este lugar, enseguida el corazón de Claudia se r

u cabeza, en ese momento solo quería entrar a el restaurante y terminar con toda la

o no sabe de lo que se pierde, soy lo mejor que le pudo haber pasado en toda su existencia y si

implemente deseaba que se la tragara la tierra, Daniel era un chico sumamente

algo malo

grimas por toda su hermosa cara, Claudia no podía creerlo y caminando comezó a a

úpido se habían ido a la mierda! ¿Qué es lo que sucede destino? ¿Cuando será el día en que realmente llegué a mi vi

abía escuchado lo que está le había dicho y mientras caminaban llorando choco su ho

illó para recoger todo lo que había hecho mientras c

uelo subió su mirada y pudo ver con quién había chocado, este se trataba de un hermoso chico alto

n había quedado impresionado por el simple hecho de ver a esta hermosa mujer, la cual era bajita con unos

s en silenció viéndose, este al ver a Claudia realmente no sabía que decir –

limpio su cara, luego de eso extendió sus manos y le entrego sus papeles, está solamente quería largarse de ese lugar, aunque le había encant

a me tengo que ir! – comenzó a cami

como aquella mujer rápidamente comenzaba caminar hasta otro lugar, pero sin pensarlo de manera

¿Por qué lloras? Las niñas lindas como tú no deberí

e con fuerza soltó la mano de aquel hombre que sujetaba su brazo. — Es un problema personal, g

ve sonrisa y miro los papeles que aquella mujer les había dado y sin mas que hacer co

simplemente al ver a Lukas este se encontraba ya caminando y pudo notar el hermoso tatuaje que

basura de Daniel le había hecho pasar y se encontraba en el centro de París así que se dirigió al más cercano, luego de estar frente

ta! ¿Qué es lo que de

que tengo en mi cabeza y en mi pecho ¿Qué es lo que me recomienda usted seño

arbilla de Claudia y le subió la cara par

rar ignorarlo, primero estás tu qué cualquier pendejo! Ahora lo segund

sonreía–, pues si sirven el trago de Vodka, hoy

Claudia y comenzaron a mirar que además de eso se encontraba solitario, estos sabía

traba Claudia llorando mientras tomaba su t

la de Smirnoff ya pagada! Nos dijo el

la y mirando al cantinero le dijo muy e

ue no necesito nada de él ni de otro chico! Yo sola

ado se acerco a ella por la espalda y al oído

ella ¿Quieres alguna otra cosa? Te doy lo que tú quieras en cambio de ese dulce

u pierna rápidamente se asustó y con mucha fuerza

misma pueda pagar mi borrachera! Ahora al

e que quieres, soy irresistible. – nuevamente v

amente la mano de este hombro de su p

dije que

la nada apareció de la nada aquel hombre apuesto vestido muy formal con ese perfume único, el c

dijeron que no

bre alto y apuesto se sintió muy aliviada pues, sabía de qué nada