La venganza de Alba
a Saúl en cuanto me ve, su v
enté suavizar el ambiente,
Sus ojos estaban enrojecidos p
to? —su voz quebrada y sus lágrimas
re de verdad —reí con una mezcla de amargura y desdén—. Es verdad, me a
acercó a Saúl y lo abrazó,
ía a alguien fiel —dijo la rubia con una
s me alejaba, Saúl me guiñó un ojo con resignación mi
e abrumada por la carga emocional del enfrentamiento con Saúl. Debo realizar un trabajo muy importante
lograba comprender cómo no había estallado en ira, me di cuenta de que Brad probablemente había intervenido para ca
has y sus dificultades en la relación con su hija. Observé el brillo de la compasi
fundo que la ausencia de un ser querido podía tener. No podía evitar se
argo, al no ser la más popular de la clase y con Saúl distraído en algún lugar desconocido con la ru
noches de estudio incansable. Sabía que estaba prepara
para entregarlo. Sin embargo, mi avance se detuvo abruptamente cuando el profesor me llamó. Tod
lvido que ese es
profesor? —fi
ue Lewis es
ajo, pero yo lo terminé po
rque ha faltado a todas mis clases —
con tu apoyo, Sáenz. ¿Te gustaría ser mi ayudante de cátedr
ncantaría. Muchas grac
lum y ganaré experiencia. Estoy segura de que aprenderé mucho del profesor W
Ella es la ex de Saúl y me odia por dos razones: so
mi novio, ahora le coque
o, y dos, ni coqueteando apruebas la materia. D
bra, no como a ti
ré saliva
mas, ya soy una adulta y debo trabajar para pagar mis deudas. Con los trabajos de recepcionista y ayudante de cátedra
padres los castigan si no tienen buenas calificaciones. Es un negocio redon
ente con mis canciones favoritas. Tengo una lista de reproducción para caminar, otra para
re cómo realizar mi trabajo. También es muy chis
Me dirigí a la cafetería y compré un refresco de naranja y unas galletitas. Me alcanzó justo para eso, lue
a, pero mi refresco cayó e
rdes y el traje impecable, ha
S EST
ía bien. Usted estaba d
visto, no ha cambiado nada con los años. Gael fue mi amor de la infan
mpresas y yo no me quedaba callada. Él es la clase de persona
pero estás desped
utiérrez
l simplem
érrez. Tendría que ser torpe para da
mismo tiempo por no haber tenido contacto con ese sujeto. Quizás es lo
nto se acercó Alexander junto con su padre.
—Por primera vez escuché su voz de cerca. Es imp
la nueva recepcionist
xtiendo mi mano y él la toma, lu
que oculté en esta falsa sonrisa, como si supiera que
bien mis sentimientos, he esperad
a la empre
cias, señor