El CEO INDOMABLE
sala d
a con él y con Yves, abrió la puerta violentamente. Al intentar salir con ella
sto? -gruñó ella, fuera de
pensar, en lo que esto me afe
o miembro de nuestra familia a cualquier trapo q
sonriendo- Porque precisamente, así fue como nos conocimos. ¿Recuerdas, mi
ue entres en esta discusión -gruñó Venus, m
ome zorra, me hicieron parte de la discu
la puerta. Al quedar solos en la sala de junta, él la tomó por la cintura, atrayen
ra necesario que todos se enteraran de nuestro compromiso. Obvia
días? -Preguntó incrédula- Pensé que lo habías
steza- Ivy quiere irse, dejándote segura, casada. Lamenta
se su voz- Nunca, tendré cómo pagarte esto. Todo lo que haces por mi
ú sabes cómo pagarme! -Susurró él, al oído de ella muy amoroso, mordie
enamorada y levantándose del esc
o sus brazos y pasando sus manos por la mesa de l
as, mi amor! -Objetó ella- Solo de
. Ellos, compartieron caricias, hasta que a punto de perder e
vó y anunció a su asistente que no regresará en todo el día. Yves, fue objeto de muchas miradas, sobre todo de
to. Luego, habló con Ivy para anunciarle que en quince días se casarán, con
boda... y mue
cieron en el apartamento donde reside ella, para evitar tener que movilizar a Ivy hacia otro lugar. De es
onald. Además, de Rachel y Rose las mejores amigas de Yves. En ese momento, Ivy
de ella llegó a su triste final. Las amigas de esta, decidieron quedarse con
por asuntos de negocios, los cuales no pudo evadir. Él, pensando que las amigas de
*
él. Ella lo había llamado, pero su celular siempre salía fuera del área de cobertura. Presumiend
ada. Lamentablemente, cuando salió de viaje perdió su celular, en uno de los baños del aeropu
éndose abandonada por él. Esta, dejó todo como estaba cuando llegó a vivir ahí
, justo en el instante, que Donald estacionó su coche al
o, pero no encontró a nadie. No había nada en el closet de la habitación de ella, salvo una bolsa grand
abandonado. Este salió rápidamente para el lugar donde está vivía anteriormente. A pesar de estar muy dis
, señor? -l
l, dejando sin habla a la mujer desconocida, quien des
n embargo, ¿si quiere llamo a sus amigas? Para averiguar ¿si sa
-contestó él, llevándose la ma
. A los cinco minutos, las dos jóvenes estaban ahí, de
eguntó Rachel, apr
mensaje de donde pueda estar -indicó él, sin querer dar ninguna explicación- ¡Por favor
por su amiga- Bueno, ella no tiene celular. Recuerdo que te hizo varias lla
omento Yves me refirió que se iría a alguna parte. Además, aho
e tiene a mí! ¡Entiendan! Soy su esposo y no la voy a dejar sola -En
coloqué sobre el lavabo, cuando me di cuenta de ello, me devolví, pero ya
tres días regresabas! -resp
ndo regresas!
mal. Él, reflejaba en su rostro el nivel de culpabilidad que traía encima, por lo desconsiderado
el, con tristeza, mirando a este a los
iones, sacó una tarjeta del bolsi
ro perder -afirmó él con una voz y mirada suplicante. Donald sali
esponder, puesto que siempre les ha parecido qu
n con sus ojos abiertos como plato, asombrada por la noticia y fu
on furia, mirando a las dos amigas de ella manoteando
*
Yves y lo que estará sintiendo al verse aba
on ella -exclamó él, dando con el puñ