El Zafiro de Mi Destino

El Zafiro de Mi Destino

Gavin

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Capítulo

La noche de "Visiones de la Moda", me sentía la reina de mi propio universo. Mi marca, "Aura", era la envidia de la industria, y yo, Elena, flamante diseñadora, lo tenía todo. Pero mi ex prometido, Ricardo, el hombre que me abandonó en el altar por mi propia asistente, Sofía, reapareció. Junto a ella, intentó humillarme públicamente con su falsa lástima y ofrecerme un puesto de "diseñadora junior" en su fallida empresa. Su prepotencia, mientras se burlaban de mi éxito, revivió el recuerdo más oscuro: su "amnesia" fue una farsa para traicionarme y robar mi herencia. La traición, el engaño, el dolor de ser descartada por quienes más confiaba, me quemaba por dentro. Pero ya no era la Elena ingenua de hace cinco años, la que huyó herida a Europa. Con una sonrisa que ocultaba una furia fría, levanté mi dedo anular, donde brillaba un zafiro estrella: "Estoy casada". El anillo de Marcos Varela, el magnate, el intocable, el hombre que Ricardo buscaba desesperadamente para salvar su negocio, ahora adornaba mi mano. La desesperación de Ricardo se convirtió en furia, y me atacó, arrastrándome, rasgando mi vestido, hasta que un golpe me sumergió en la oscuridad del sótano. Cuando creí que todo estaba perdido, de alguna manera, logré salir. Pero la humillación no había terminado: Ricardo, desquiciado, me arrastró de regreso al salón, con el rostro ensangrentado. Frente a la élite, con un cuchillo, intentó amputarme el dedo por "ladrona". Justo cuando el filo rozó mi piel, la voz de un asistente retumbó: "El señor Marcos Varela ha llegado". El héroe irrumpe en escena, revelando mi verdadera identidad: "Esta mujer... es mi esposa". El hombre que creyó destruirme, ahora enfrentaba el verdadero poder. ¿Qué pasará cuando Ricardo y Sofía enfrenten la ira de Marcos Varela y la verdad detrás de mi ascenso?

Introducción

La noche de "Visiones de la Moda", me sentía la reina de mi propio universo.

Mi marca, "Aura", era la envidia de la industria, y yo, Elena, flamante diseñadora, lo tenía todo.

Pero mi ex prometido, Ricardo, el hombre que me abandonó en el altar por mi propia asistente, Sofía, reapareció.

Junto a ella, intentó humillarme públicamente con su falsa lástima y ofrecerme un puesto de "diseñadora junior" en su fallida empresa.

Su prepotencia, mientras se burlaban de mi éxito, revivió el recuerdo más oscuro: su "amnesia" fue una farsa para traicionarme y robar mi herencia.

La traición, el engaño, el dolor de ser descartada por quienes más confiaba, me quemaba por dentro.

Pero ya no era la Elena ingenua de hace cinco años, la que huyó herida a Europa.

Con una sonrisa que ocultaba una furia fría, levanté mi dedo anular, donde brillaba un zafiro estrella: "Estoy casada".

El anillo de Marcos Varela, el magnate, el intocable, el hombre que Ricardo buscaba desesperadamente para salvar su negocio, ahora adornaba mi mano.

La desesperación de Ricardo se convirtió en furia, y me atacó, arrastrándome, rasgando mi vestido, hasta que un golpe me sumergió en la oscuridad del sótano.

Cuando creí que todo estaba perdido, de alguna manera, logré salir.

Pero la humillación no había terminado: Ricardo, desquiciado, me arrastró de regreso al salón, con el rostro ensangrentado.

Frente a la élite, con un cuchillo, intentó amputarme el dedo por "ladrona".

Justo cuando el filo rozó mi piel, la voz de un asistente retumbó: "El señor Marcos Varela ha llegado".

El héroe irrumpe en escena, revelando mi verdadera identidad: "Esta mujer... es mi esposa".

El hombre que creyó destruirme, ahora enfrentaba el verdadero poder.

¿Qué pasará cuando Ricardo y Sofía enfrenten la ira de Marcos Varela y la verdad detrás de mi ascenso?

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