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Libros de Moderno para Mujeres

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Tiempo De Morir

Tiempo De Morir

Serie Todo Tiene Su Tiempo Una nueva historia cargada de sentimiento y emociones. Una vida que ha tenido grandes batallas donde conquistó destacadas victorias, una mujer que ha derramado lagrimas como también sonrisas. Madelin atravesará grandes decisiones en su vida, momentos que marcan un antes y un después, el secreto mejor guardado de la madre de Madelin sale a luz, ¿Podrá lidiar con eso? Calvin su esposo le engaña por momentos con Úrsula su prima lejana, quien ahora visita la casa más a menudo, una amistad y confesiones hacen la antesala. Madelin descubre en una visita médica que su salud decae como su mismo corazón decae ante los embastes de sus propias mareas. Madelin toma una gran decisión, pues el tiempo es importante y vital para gastarlo en lo único que podrás tener, días maravillosos. Las decisiones que tomamos marcan la vida de otros, y es que reconciliarse con la vida en sí, no es fácil, pero quien dijo que es algo imposible. Su hija Pamela aprenderá una lección que le llevará a elegir un destino diferente. Fuertes emociones, lagrimas, dolor, flores secas y marchitas, secretos, mentiras y amor, forman parte de esta nueva entrega de la Colección Todo tiene su tiempo. Disfruta una nueva historia cargada de sentimientos, emociones que pueden tocar la puerta de tu alma. "Y ante una tumba fría solo resta colocar unas frías flores, mirar al vacío y llorar de dolor, o sencillamente sentarse debajo de los árboles para recordar los días maravillosos" La Autora: Charló Blus
UNA FAMILIA INESPERADA PARA EL VIUDO

UNA FAMILIA INESPERADA PARA EL VIUDO

Davi Rivera tenía todo calculado en su vida, y eso incluía realizar su mayor ambición, ser el presidente de la empresa familiar. Sin embargo, con lo que no contaba era que una mujer intrigante volvería a cruzarse en su camino, o mejor dicho, nunca lo había dejado. Manuele lo intrigaba y lo hacía sentir como un joven adolescente. Para un hombre que siempre Pensé en el futuro, no tener tiempo para el presente, una noche no planifcada, fue arriesgado. demasiado. Sin embargo, él tenía. Y esa noche, él la había hecho suya. Manuele Cardoso solo tenía una cosa en mente: el tiempo nunca se detiene. Ella sería prácticamente sola en el mundo, si no fuera por la ayuda y el cariño de sus jefes, que siempre Los trataron como familia. Sin embargo, siempre peleó sus propias batallas, y con la esperanza de que una día, tendría a alguien a quien llamar suyo, y quién sabe, pasaría el resto de su vida con esa persona. O Lo que no imaginaba era que el hombre que siempre había despertado sus más profundos deseos, su parecería. Se suponía que sería solo una noche, pero no sabía que todo cambiaría a partir de entonces. David estaba decidido... Manuele era un apasionado... Una mezcla de sentimientos que generó un fruto... Un matrimonio que de repente se convirtió en un caos... Un secreto que puede cambiarlo todo... Después de todo, ¿cuál será la redención de este hombre? "Me rendí contigo 21 veces Sentí esos labios decirme 21 mentiras Tu serás mi muerte sabio consejo Amarte podría hacer llorar a Jesús"[1] Las palabras aún resonaban en mi mente, marcándome como el gran idiota del siglo. ¡Yo sabía! O más bien, tenía que tener sospechoso. Todo lo que pasó entre nosotros, lo que pasó después de ese día. juntos... Era demasiado bueno para ser verdad. Me llevé las manos a la cabeza, el grito se atascó en mi garganta, sin embargo, el dolor era tal que no podía expresarme. fue como mi corazón estaba siendo destrozado, y mis pensamientos revivían y marcarme con toda su asfxiante confesión. David Rivera fue un mentiroso profesional, y por primera vez después de meses juntos, descubrió Aquél. Miré el anillo en mi dedo y sonreí de mala gana, sintiendo el aumento del dolor en el pecho. No hubo lágrimas en ese momento, mientras todo el amor que sentía se convirtió en mi mayor debilidad. Miré Miré la puerta entreabierta y consideré por un segundo entrar por la puerta. mismo. Sin embargo, escuché mi instinto, que gritaba que me quedara allí, y luego, alejarse sin mirar atrás. La conversación entre ellos se estaba desarrollando, y me acerqué, mirando otra vez por el hueco de la puerta. Guilherme se rio de algo David dijo muy bajo, y quería ser una pequeña mosca para poder escuchar. Hacia las verdades eran necesarias, al menos sin que se notara, yo estaba conocimiento. ¿Cómo puedes fngir que no te importa, David? "¡Porque no me importa una mierda!" Mi corazón estaba sangrando. "Hermano, debes ver que ella va a sufrir, ¡maldita sea!" - William levantó los brazos y cambió su mirada, y desafortunadamente, sus ojos se encontraron con los míos. Negué con la cabeza, suplicando internamente que el mismo cuñado que conocí hace unos meses, aunque ni siquiera algo de intimidad, no me delaten ahí. Cambió su enfoque, mirando a su hermano, y suspiré aliviado. viendo a David caminando de un lado a otro. "¿Así que estás casado con una morena caliente así y no con ella?" ¿amar? mi cuñado preguntó burlonamente, limpiándose la sangre de la boca. En ese momento entendí completamente sus palabras, prácticamente dispersó el foco para que el hermano no me viera. Y ni siquiera me delató. - Te amaría desde el primer momento en que pusieras tu boca en la mía... "¡Cállate la boca, William!" - gritó David, y se rió de mí por verlo así. ¿No quería que su hermano hablara de mí? ¡Claro! Porque solo él podría ser la causa de todos mis humillación, y el dolor que me acosaba. "Ni siquiera pensarás en mencionárselo a nadie". - las palabras de David me estaban desgarrando, escucharlo me hizo sentir lástima de mí mismo. yo mismo por ser tan ingenuo. "Eso es algo entre mí y los míos". mujer. Su mujer... ¿Qué tan irónico fue escucharlo llamarme así? Me reí desconsoladamente, en medio de ese caos. No sé cómo te enteraste, pero no puedes decírselo a nadie. ¡Eso me haría perderlo todo! Decidí no ser más masoquista, me alejé de la puerta, dirigiéndose hacia la salida de la casa. Vi que el auto se detuvo, y Júlio estaba a su lado, esperándome. - Las llaves del coche, por favor. Pregunté, en un suspiro y el incluso me miró un poco incómodo. -No puedo hacer eso, señora Rivera. ...