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Bajo el hechizo del príncipe

Capítulo 4 Rania quiero escuchar tu respuesta.

Palabras:1756    |    Actualizado en: 30/03/2023

e su relación con ella debía mantenerse en secreto así que solo se presentó como un compañero de la

rina y eso no le gustó. Por lo tanto, cerró la puerta de casa en las narices de Brian, pero él no se iba a dar por vencido. Algo le decía que e

Thani la madre de su futuro prometido. La mujer se había quedado cerca desde que ella había llegado

repugna su olor! -Escupió Fátima y Samira se tapó l

para disimular su envidia. Rania no solamente se iba a casar con el hombre que la princesa siempre había deseado, sino que también era una mu

spreciarla. Ella pensaba contestar, pero hizo una mueca de dolo

a esposa de su tío Idris, que se llamaba Hana y a su hija qu

e es hija de una sucia adúltera. -Dijo Samira y Rania percibió esa punzada de

o sí lo es no debes preocuparte mi querida Samira. -Contestó Fátima tomando la

la bañera, Samira se p

omo el príncipe. Por eso yo seré la primera esposa cuando me casé con él

porque si necesita comprar una mujer dudo mucho que sea un hombre de v

pero ella sabía que su vida corría peligro entre aquella gente. Entonce

reciándola con la mirada y Rania levantó la barbilla orgullosa, no pensaba tener

das preparaban a Rania para conocer al príncipe. Le prepararon un vestido simp

s. La chica los echaba en falta y le habían permitido hablar con ellos un par de veces por teléfono. Ella sabía que estaban sufriendo por ella, pero que ellos

a de que estaban rompiendo con una parte de la tradición. La pedida de mano no se haría en la presencia de su padre

nia no quería llamar la atención de su prometido, ella solo quería ser rechazada por él y así poder volver a casa. Algo que Idris jamás permitiría

ó el Emir acompañado de sus esposas y sus dos hijos mayores, uno de ellos su prometido. Ran

también se veía pequeña y delicada, pero algo en ella llamó su atención, el velo. Entonces rompien

ó Fátima desconcertada con la actitud

os pasos de Karim no pudo evitar levantar la cabeza para mirarlo, su curiosida

la piel blanca y los ojos claros ... un tono azul tan bonito que la dejó hipnotizada. No lleg

eso es correcto? -Preguntó y Rania se estremeció, su

r, hipotéticamente ella no

viosa, pero su mirada era tan dulce que Karim no quería apartar la vista de sus ojos y levan

tados Unidos. -Contestó con firmeza ignorando aquella

radiciones, pero llevaba el velo puesto. Eso le hizo preguntarse a sí mi

antó el rostro sorprendida por la pregunta, después miró a su tío que le apre

arró la mano de Idris apartándola de la chica y el hombre lo miró molesto, pe

porque quieres o te lo ha impuesto alguien? -Pregun

n todos los hombres. Una mujer que fuera obediente, religiosa y recatada,

n forzado a aceptar este compromiso. - Declaró con fiere

a provocar una corriente eléctrica que recorrió sus cuerpos. Rania dejó de

y Karim se pegó una bofetada mental pensando que no era posible que la belleza de otra muje

la joven, su hermano Amín, un hombre caprichoso y que envidiaba

también estaba presente sintió envidia por la manera como el príncipe

ue tú decidas hacerlo y si de verdad eres una mujer que sabe

sillo y sacó de su interior un bellísimo anillo de diamantes que lleva

atrimonio. -Dijo mirándola a los ojos y sintió la tristeza en ellos, él la entendía. Estaba seguro de que Rania debía tener unas

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