Salvando Nuestro Amor

MB

a de ojos azules que conocí en aquel bar se mueve sobre mí de una manera imposible de no ser admirada. Sus manos están apoyadas sobre mi torso para ayudarse y yo me

nera de follar que tiene, tanta que me ha dejado sin

íes?— Cuest

i eras bueno o no en l

— In

a recoger mi ropa del suelo para entregármela. —Ahora, debes irte. — Me dice de la nada y a

alo me echas en la mitad de todo.— Rebato mientras me

uí. Imagínate el escándalo que sería. Además, no creas que no sé qué estás casado

gamos las cosas así y ni tú te metas en mi vida; ni y

a y camina hacia mí –Me parece genial, ¿eso quiere d

y encojo mis hombros —Puede ser, pero n

Me pregunta sin dejar

esté aquí contigo no significa que no la ame. — Intento explicarme

te preguntare nada. A decir verdad, lo único que me interesa de ti es tenerte en mi cama, si

io y me despido de ella con un corto beso para lueg

*

nte: 25 de se

ER

dónde ha estado, y mucho menos con quien. No quiero pensar en que no solo me trata como lo hace, sino

o, el verano está llegando a su fin y debo aprovechar estos últimos días de sol para por lo menos sonreír a causa de algo

croissants de chocolate que me he comprado ayer en la panadería de la esquina. Al parecer mi momento de

— Digo sin á

ntestas Serena!— Exclama

ficina, que solo haría lo justo y necesario para

todos los días, pero ¿recuerdas la licitación para la campaña publicitar

on eso? — Pregu

contrato, necesitamos que vengas aquí para poder preparar

e...—hablo e

es una oportunidad que no puedes desperdiciar por nada

lmente y es que en realidad no quiero que la gente q

Dice y termin

.

. Al salir de mi habitación me encuentro con él caminando en pantalón

ndo por su lado y al notar el chupón que lleva en su

s?— Me pre

spondo en el mi

as más a tu ofi

no puedo dejar a mis empleados en

a con el obstetr

erdas de eso.— Coment

que mis hijos son lo

hijos nazcan tú y yo nos divorciaremos; de esa manera ella podrá tener esperanzas de que tú te cases con ella.— Me limito a respond

salir de la casa y subirme al auto para que mis lágrimas se transformen en un m