Por siempre mía

u casa y se coló en su habitación por la ventana justo, unos momentos antes de que su madre tocara la puerta para pedirle que le ayudara con la cena; sin em

jos, apúrate, que no solo vas a desayunar, me ayudarás a llevar

adre tampoco era que la fuera a dejar

desayunando lo más rápido posible y ayu

el lago, Josefina… había pronunciado su nombre varias veces y era como si le he

ía porque si no no se explicaba como seguía escucha

apúrate, llegas

estuviera durmiendo y aquello fuera un sueño, se quedó pla

uedo ll

osefina volvió a escuchar esa voz, por lo que

, solo tiene que ir un poco más rápido, no se preocup

istió Ricardo— Tengo que

en el joven frente a ella, tendría un par de años más que ella; sin emb

e su madre le decía, pero

ue te vayas. No hagas perd

n, sacándola a empujones de la cocina. Pero sin ningún resul

e pequeña cuando él se fue o tal vez era más grande y no le había prestado atención, aunque de eso ha

respuesta, de verdad

asta su camioneta, se portaría bien, no la asustaría y se disculparía por lo del d

algo, si no hubiera estado hipnotizada por la presencia de ese joven lo habría hecho, pero ella simplemen

sefina, solo voy a l

ta el del conductor, intentando evitar dar saltitos como alguien que estaba muy feliz por lograr algo

dad— aseguró con una sonrisa cómplice, en realidad esperaba que aceptara

he para salir de la hacienda y pasar el mayor tiempo posible con aq

stado en

l pueblo, no había dinero y tampoco había motivos pa

edio, sino por el que dirán…— No puedo ir a la escuela — dijo de pronto, pero tampoco deseaba d

onrió asintiendo antes de volver a

Alejandro Villamonte, pasé varios años estud

carretera general en lugar de

ra mi intención, pero hoy voy a compensá

uando la noche anterior le aseguró que lo mejor que podía hacer era volver a los estados unidos y hacer ese máster, estaba harto de

ese tipo de trato, mucho menos

, llevándola a bajar la mirada y fingi

el nieto de don Federico. — Solo me asusté porque casi nadie va a esa hora a

, porque, sin duda, tenía ganas de volver a ver ese cuerpo semidesnudo y esa piel perlada por el agua, porque por muy amo

l, tú no sabías quién era

e no ser así, posiblemente ya estaría abrazándola para calmarla y no sabía si sería muy bien recibido su acercamiento, ni

qué cur

algo tenía era que quería llegar cuanto antes y seducir