icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Destinos entrecruzados

Capítulo 9 Un almuerzo revelador

Palabras:5202    |    Actualizado en: 04/01/2023

u

a la cocina a buscar una botella de agua veo que lavó los pocos utensilios que usamos en el desayuno y me sorprende la naturalidad con la que se da la

ya acostumbrado a mis bro

recién una semana de que trabajas conmigo, ¿te diste cuenta?

ce un siglo? -bromea él tam

sorprendida una vez más de lo atractivo que es el morocho que me acom

molesta que le cuente de mi vida personal, y cuánto me divierte a mí hacerlo igualmente, en parte para fastidiar

información que me da de su vida o la de su amiga

uevo -digo con burla, haciéndole

por el espejo retrovisor con toda

ora voy a retenerlo -dice desafiante

orque su novio le había metido los cuernos el 31 de diciembre, así que ella empezó su año llorando por que le fueron infiel y ahora fue la persona con quien hicieron infiel a otra -suel

e lo más coherente que se ofenda -di

ondo victoriosa, levantando los br

nfirmo nuevamente que es el homb

esa pinta de malo, sos un blandito -digo si

o, con una expresión de “si supieras”, que inmediatamente me t

arle el ánimo. Anda pensando que se te ocurre -digo mientras palm

erta y caminamos jun

ido de lo normal. Cuando salgo lo encuentro revisando

números? -pregunto c

vista muy

ue no me incumbe así que le pido disculpas, no vo

eras, no hay nada raro -afirmo con tranquili

e con Martín, por lo que me acerco a ellos, pensando que e

las del rubio y abrazo a mi amiga con fuerza por varios minutos-. No

entera como si no le importara nada ni nadie -rep

es tanto. Vamos a sentarnos que tengo hambre -dice

trasero descaradamente. Escucho a alguien toser al lado mío y el gesto de Martín se tra

onces Sol se gira, para ocupar u

s? -pregunta mi

s -miento mirando hacia mi custodio, que me de

luego vuelve

a me contó mucho de vos -dice ella

parece, me voy a ubicar en aquella mesa. Permiso-. Ter

uenísimo -dice mi amig

o estas -intimo a Sol, mientr

, se saludan con un beso rápido y comienzan a mirar la carta. Cada tanto Martín habl

asó en estas semanas en las que no nos vimos. Cada tanto intercambio u

para verlo y lo encuentro, efectivamente, mirándome con mucha concentraci

ando? -pregunta fi

lema. Se acostaron, la pasaron bien, no va a volver a pasar, listo… Terminó. Tam

abajo, con los ojos

rte de que fue el mejor sexo de mi vida? ¿Y la parte de que me gust

reer que te enamoraste con un solo garche

o voy a ver de nuevo y no sé cómo voy a hacer para

do que es él y lo bueno que debe ser en la cama -digo señalando a mi custodio, que ahora está enfo

a que se acerque y ob

oda su masculinidad, veo de reojo que

Pablo -dice mi amiga ofuscada-. No me vas a entender nunca po

hacia mi custodio, que rueda los ojos y niega con una sonrisa de lado-. A

con educación, aunque comienzo a advertir que se

r sin terminar por una urgencia en el trabajo -habla

én Ramiro. Ramiro, Martín, Martín, Ram

ensar que sería demasiado interesante ver como luchan por se

ar, por ejemplo? -pregunta mi amiga, a

andas Luna? Hace mucho que no te veo -sigue con un claro

mientras llevo la mano hacia el brazo del m

as cejas y se ríe mientra

iramisú -dice So

tir un brownie -contesto,

ate -completa Martín, mientras

do para personas con movilidad reducida. Quedo de espaldas a la puerta cuando ésta se cierra y puedo reconocer claramen

n. Siento que los movimientos se detienen y cuando miro, veo que está liberand

menzar a moverme mientras su lengua juega con mis pezones alternadamente. Me da un golpe en el trasero con la mano abierta q

n el ritmo. Lo complazco, moviéndome en búsqueda del orgasmo, que no se hace desear, permitiéndome acabar

e en mi oído y yo m

incorporo para vestirme y salir en dirección al baño,

n están conversando muy entretenidos de algu

tan los números -indago cuando s

e y puedo entender que por algún

o a dos de los hombres que más me gustan, aunque no puedo negar que lo que me genera Ramiro

am

ue no se fue solamente a tener sexo con el hermano de la amiga, que se not

del cuerpo de esa mujer que me quita el sueño hace una semana, m

iro? -pregunta Sol, si

ad- ¿Y usted? -pregunto más p

fuera, me fui a estudiar y ahora tuve que volver -s

invitarla a hablar y así

padre. Me apena un poco verla tan triste, en especial porque me recuerda a mi hermana, con tantas aspiraciones y proyectos laborales truncados por problemas famili

-pregunta la joven rubia, que

rdó a mi hermana -con

as en común -dice una voz a mis espaldas y puedo advertir que se

ersación sobre economía, desviando la atención de las cuestiones

rechazo hacia ella, de solo pensar que fue capaz de a

ás serio que de costumbre, completamente inmerso

ecidí revisar los libros del lugar y advertí muchas inconsistencias. Es obvio que el contador

pasarla rigurosamente especificada a Verónica, qu

imagen de hoy, cuando mientras almorzábamos vi a Luna sonreír y hablar libremente, con esa frescura que la caracteriza. Su piel muy blanca, bordeada c

a la perfección, siento que el aire queda atascado en mis pulmones cuando la veo saltar y girar en el aire, para luego caer perfectamente apoyada en el piso. La melodía comienza a acelerarse y ella l

brazarla y siento una inmensa impo

de servicio sonar y

nformación de que pueden usarla para trasladar papeles de la empr

ra luego cortar la comunicación, d

? -pregunta, todavía con

-contesto co

o al departamento escuch

la hacia el exterior-. Está bien. Puedo estar en unos minutos. Chau -d

irando, para retomar el

esarmar el rodete de su cabello,

comienza a sacarse el abrigo sin pudor, haciendo que mi entrepiern

a otra remera sobre la misma. De su bolso saca unas zapatillas depo

que no hay ningún rastro de la bailarina que

anza. Vengo del gimnasio -dice m

u actividad, sino que la está usando en su favor, hace que mi enojo ap

su hija, que no tienen un vínculo cercano. Cada uno cuenta

padre desliza al pasar un pedid

Jorge, te paso la ubicación -dice el padre,

spide ella, llevando

as -dice el padre en

zo a pensar cómo podría hacer

-pregunto, mientras una idea c

ión. ¿Te la paso? -sugiere, sir

sin dudar, rogando

rojo para enviársela a Verónica, indicándole qu

a, diciendo que la casa inmediatamente contigua se

sted está desabrigada -digo al estacionar, mient

in importancia, pa

r un mensaje a Verónica, pidiendo que desactive la antena y señal del teléf

e pero no tengo señal -afirmo, rogando qu

haber algún problema general -dice ella tr

plan haya funcionado, aunque los nervios de

l interior, solo que hoy tengo la indicación de quedarme con ella, po

no tenemos posibilidad de comunicarnos, como hoy no tenemos teléfonos, debería hacerlo,

ace que mi corazón se acelere, de solo imaginar las miles

pedes está ocupada con insumos del estudio que todavía no logré org

reocupe -me apresuro a acl

ga con la cabeza mientras la so

¿no? -contesta coqueta, mientras se gira

la mitad el sonido del agua se detiene y mi corazón comienza a acelerarse, sabiendo que el tiempo que me queda es cada vez menos. Por lo que voy

de la puerta de su cuarto me obliga a escond

a dormir vestido así? -pregunta al llegar a

engo ropa para dormir, solo estaba esperando qu

y a preparar un poco de té -afirma

sobre el sillón, preparándolo como una cama para mí. No puedo evitar notar que sus muslos son terri

a las dos tazas de té, q

se enfrían -

ocasión para calmar la dureza que

e contemplar lo trabajado de mi cuerpo, porque la remera que llevo, siendo de una tela fina, deja ver mis pectorales y abdomen marcados, y obviamente, mis fuertes brazos están descubier

más serio que de costumbre -increpa, recor

terminar por fin con el escaneado de esos documentos. Decido que lo mejor será

no de su amiga, que por lo que pude entender, además está

enor pizca de c

nta en forma sugestiva, mientras me acerca la taza, aprovechando

labios. Tomo un sorbo y dejo la infusión en l

ecisamente -digo en tono calmo, esperando que decida irse a su habitación para terminar lo que tengo que hacer, au

me olvido que estar acá conmigo es tu trabajo -por primera vez puedo ver un

no seguirla. Me repito una y otra vez que no puedo dejarme llevar y me

uro y tomo los documentos, para por fin terminar de escanearlos. Cuando lo hago, envío un

on esto. Los jefes están sumamente confor

n un tono muy bajo, pa

igue Verónica no

o -la apur

e ganas de tener algo más con vos -dice con cautela, eligiendo muy bien las palabras-. Y creem

, me está sugiriendo que me acueste con otra mujer, que casualmente me tiene loco de ganas. Al mismo tiempo, como mi superior en el plano laboral,

-pregunta luego de un

ión perfectamente ¿Algo

veamos pronto -agrega antes de cortar, a lo que no c

rvado, por lo que me dirijo al balcón, donde respiro varias veces en forma profunda. Miro

mina lastimado? No puedo evitar notar que de todas las opciones, la más aberrante me resulta pensar que sea ella quien termine sufriendo, pero

abitación. Cuando estoy a solo unos pasos de su puerta, ésta se abre

ón reflejada en sus hermosos faroles grises. Sin pensar la tomo de la cintura y atrapo sus labios con los míos. La siento tensa

. Me acuesto sobre ella y llevo una de mis manos a su entrepierna, aprovechando lo corto de su vestido y encuentro su clítoris ya completamente endurecido, l

mientras mi boca se abre paso hacia uno de sus pezones, gracias a su escote pronunciado. Cuando siento que

Ella ayuda mis movimientos y en solo un par de minutos la tengo completamente desnuda, pudiendo admirar ese cuerpo que me enloquece. Su tez muy blanca, con los pequeños pero marcados senos coronados con s

e lo más profundo de las entrañas. Ella gime y arquea la espalda, haciéndome entender que está dis

inuyo el ritmo de la penetración, disfrutando de esta nueva pose, en

os una vez más. La escucho gemir con más fuerza y abro sus piernas nuevamente, para acostarme sobre ella y acallar sus gemidos con mis

la a recostarse en mi pecho. Cuando lo hace acaricio su e

e en un sueño profundo. Giro la cabeza buscando encontrar un reloj para ver

lia, y es justamente la persona por la cual estamos acá, solo

que cuando todo esto termine esta h

ene que sufrir alguien, que sea yo -digo en

Obtenga su bonus en la App

Abrir