Promesas de Amor

ail

har que Boris ha venido aquí a visitarme, cuando le dije que no podía debido a que, Vadim ahora ha co

endré mi doctorado como abogada penal y podré salir corriendo de esta casa para no tener que ver con ese hombre. Lamento mucho que no pueda cumplir con mi promesa, per

e y cumpla la amenaza de arruinarme todo, no es la primera vez que logra cumplirlas, una vez lo hizo cuando me fui a una fiesta, al día siguiente cuando llegué, me amenazó que la próxima vez que me fuera a un Antro él me iría a buscar para sacarme de allí, y así fue, el siguiente fin de semana sin yo creer que lo haría se apareció al lugar donde me encontraba, me subió a su ho

ha vuelto como una tía para mí, es quien se encarga de la limpieza del hogar y de escuchar mis lamentos de cada día, aparte quien arriesga su trabajo para que yo n

ome muy alegre por verme, miro y me aseguro que el idiota de Finn no se fije de la presencia de Boris, parece que su profesión en vez de ser escolta es de espía. Fi

n avisar — Boris me da

emas con Vadim, por favor vete, yo me alisto y

Qué más no puedo hacer, Abigail? No eres una niña a la que él deba controlar, no sé cómo puedes seguir e

Boris faltan unos meses para yo lograr mi sueño y así poder irme, ya obtuve mi título universita

apartamento, Abigail no voy a pasarme la vida esperando que dejes esta casa, no voy a continuar

porque se trata de

sta casa o termina

empo que hemos estado juntos he aprendido a quererlo, aunque

nar de pagar el doctorado y lo que falte, lo único que quiero es que ya salgas de aquí y podamos tener una relación como dos personas normales, no somos unos niños, yo no soy un niño, tengo 30 años y lo que menos necesito ahorita es tener a mi lado a una mujer que piense como una adolecente — sus palabras me duelen, pero tiene razón

or

nfierno? — Miro a los lados suponiendo — No

is cosas — debo dejar de pensar en Vadim para centrarme en mí, seguir a

tu ropa, Abi, ni siquiera te lleves el auto, y

nerviosa, lo siento c

nada bien. No tienes idea de lo que me afecta mirarte cada tarde cuand

uanto estudio y lo difícil que es estudiar derecho penal, más cuando me estoy especializando en la carrera, estoy a n

as, no lo

momento y no quiero que ambos entren en co

e esto pase, déjame pon

— sigo in

ue nos despidamos así, pero entiendo que tenga derecho a molestarse e irse sin hablarme. Al darme la vuelta para entrar en la casa me percato que F

ir atándome a su hijo, sé que esperaba que yo cumpliera mi promesa en este tiempo que estaría e

ca forma de que Vadim no me moleste es que me adelante a los hechos y le haga saber que me largaré de su casa mañana mismo, aparte

ía terminar la carrera debido a que mis estudios lo paga esta familia, si me l

ra la puerta se abre y deja a la vista un Vadim enojado, él se me acerca y mira a u

vio a buscarme, mañana me iré y no tendrás que verme más

a sido claro contigo,

berías sentirte feliz de que me largo ¿

su ceja — ¿Con él? ¿Te largas con él? — no l

rtante a donde voy —

esulta que ahora no quiero que te vayas, no si es para irte con ese hombre — me toma por sorpresa su comentario —

ra lo que tanto querías, lo que muchas

ando él sube sobre mí — Harás lo siguiente, terminaras con él mañana o cuando sea que venga por ti, lo harás frente a mí, le dirás que no lo quieres y que no te irás con él, de no hacerlo, haré que tu esfuerzo de estos años en tus estudios se veng

digo entre llanto y él a

rmines, de ti dependen tus estudios. Si lo prefieres a él las puertas están abiertas, pero si prefieres tus estudios enton