Amor ardiente
ge
taos bel
t-Miles, él y yo estuvimos saliendo.
mplemente me costaba imaginar a alguien como Ángela con alguien como
suerte que tenía de tenerme. Yo no solía corresponderle aquel tipo de comentarios, es decir, él me gustaba y me hacía sentir bien estar a su lado, pero no le quería. No sentía estar enamorada de é
on las mangas de su sudadera en un gesto nervioso. Podía notar en el temb
icas de fiesta solía ir él también con sus amigos para asegurarse de que nadie se me acercara, incluso cuando él comenzó la facultad y me quiso presentar a su nuevo grupo de amigos escogió él la ro
ara seguir hablando. No quería que se sintiera obligada a decírmelo, podía esperar a enterarme de aquello para
ecesario que sig
re mi mano, volviendo la vista a mis ojos, y aun con
ses pero era lo que tenía que soportar, supongo. Ahí fue cuando conocí a Kian. Siempre me pregunté qué demonios hacía él con el grupo de Nate, no encajaba en absoluto. -dijo con una pequeña sonrisa al recordarlo. - Él era tan bueno... Era un chico amable, divertido y muy inteligente. Él
de aquello? -murmuré algo sor
creía que con Kian, que era su amigo, no haría nada que una chica no debiera hacer. -dijo rodando los ojos. - Él me hizo ver que Nate realmente no me quería, que yo no me merecía vivir así. Cohibida de todo, sin apenas salir, sin poder ver a mis amigas, sin poder vivir...
compulsivamente las lágrimas que comenzaban a descender por su rostro, queriendo mostrarse fuerte ante aq
in si quiera poder imaginarme lo que deber
o y, a pesar de todo aquello, la maravillosa persona que seguía siendo. Y
grimas seguían brotando de sus ojos con rapidez. - Nunca llegó a darme, siempre pude esconderme tras algún sofá o tras alguna puerta. Podía leer la ira en sus ojos, era como si se transformara en alguien completamente distinto, y sentía el miedo en mi pec
er en aquel momento era envolverla entre mis brazos con fuerza. No pude evitar pensar en Nate, yo le conocía bien y sabía de lo que era capaz, por eso mismo, desgraciadamente, no me sorprendió dema
al. Él siempre debía tener la razón. Aquella vez si que se cabreó, si antes creía haberle visto enfadado no fue nada comparado con aquello... Mi casa terminó destrozada, comenzó a romperlo todo a su alrededor, las fotos, los cojines, alguna prenda de ropa por allí en medio... Hay días en los que revivo aq
ipo de resistencia ante aquello, envolvió sus brazos alrededor de mi torso aferrándose a mí con fuerza y quebrándose allí mi
rse firme mientras ves cómo la person
la... -murmuré sobre su cabello. Su e
za en mi cuello y yo paseaba mis manos a lo largo de su espalda, cons
a otro chico estando con él. A partir de ahí cada vez que me cruzaba por la calle con algún chico de los de su grupo, los más simpáticos simplemente me giraban la cara. Otros optaban por decirme lo
ge
daban los paraguas normalmente, lo sacó al jardín trasero que era donde estába
estras despedidas. Todos le conocíamos de una manera u otra, algunos habíamos llegado a establecer incluso una pequeña amistad,
éramos iguales bajo la luz
er lo que ha escri
ue fue él quien dio la cara y nos dijo lo que realmente ocurrió. Antes de todo aquello, recuerdo un día antes de un partido contra los del East, donde estuve hablando con él sobre la mierda de árbitro que nos había tocado. -dijo soltando una pequeña risa. - Recuerdo que cuando se acercó hacia mí pensé; ¿qué demonios hace este tío? Es decir, no sé si sabe que va a jugar contra lo
co a poco, vimos cómo el humo que provocaba se desvanecía hacia arriba, llevándos
a Jude, y fue Vera quien
on él por el campus, pero sobre todo le conocía por el maldito señor Geller. Siempre hablaba de un tal Kian Miller que había sido uno de sus mejores alumnos en lo que llevaba de carrera como profesor, y yo pensaba joder tiene que ser realmente bueno, porque el señor Geller no es precisamente de la clase de profesores que van dan
pel se consumía. Volvió a su sitio junto a Liam, quien la acogió en un cá
murmuró Alexis en mi oído
o la verdad es que no me veía capaz de
stro mientras se inclinaba a dejar u
re que tenía sobre mí y haciéndome sentir la brisa rozando mi nuca ante la fal
ue podía pedir. Sólo te bastaron un par de horas para darte cuenta de la realidad en la que estaba viviendo realmente. Y sólo tres fueron suficientes para acercarte a mí y comenzar a hacerme ver que todo aquello realmente no valía nada de lo que yo me pensaba. Tú no me conocías apenas, pero aquell
erme por los hombros. Mi corazón latía al ritmo de la tristeza, deshaciéndose y tornándose del color de la mel
me duele decirte adiós esta noche, porque solo espero que seas la última persona que caiga en este juego de venganzas y rivalidades. Sólo me que
apel junto con el suyo. Al volver a mi lado, me sujetó de la barbilla para deja
stro Lex. Porque te lo mereces... Cuídalo por nosotros allí do
sus papeles. En silencio, nos mantuvimos unos minutos más allí, rodeand
maldad y solo estaba formada de sonrisas y buenas intenci
os abandonaba en la Tierra, su aliento seguiría resonando de alguna manera entre
ortaba, era saber con certeza que él estaría
ber dejado que él cayera en este
s, K
ge
a siempre y ahora comenzaba a gustarme, sin duda respondería
e solía quejarme porque me impedía moverme por la cama sin aplastarlo. Ahora
ora el motivo de la primera sonrisa del día. Me quedé durante unos segundos observando la imagen en el cuarto, h
ó él con la voz ronca al
recién levantada. - Me haces feliz, Keller. Tú y e
e pelo. -dijo colocando su brazo bajo su cabeza, mirándome aú
os días, poco a poco se convirtió en algo más profundo y ansioso. Colocándome sobre su regazo mientras él aun descansab
do que tuviéramos que separarnos. Alexis resopló con una pequeña sonrisa mientras se dejaba ca
e mi voz habitual estrechándolo en mis brazos mientras se acomodab
robando
una enorme sonrisa al verle girando
ono, diría
omenzaba a acariciar hacia atrás las orejas del felino. -A veces cuando le hablo par
dillas y ratones que se colaban en su huerto y se comían sus verduras, pero resultó que al perro le daba miedo hasta el sonido de una lata de Coca-Cola ab
r, no me malinterpretes no conozco a tu abuela, pe
. -Mi abuela daba más miedo que ese perro, créeme. Seguro que si encerramos en una habi
maba Dobby? -dije con
comenzaron a poner las películas de Harry Potter y co
n? -pregunté
en cinta para su reproductor de vídeo, además de encargarme una bufanda de Slytherin porque "Draco
ás normal del mundo mientras jugaba con el Coronel, pero la simple imagen de su abuela v
therin, tu abuela sin
que separaba a cada casa de otra, pero a ella le gu
a. -murmuré mientras el Coronel comenzaba a olisq
mo aquella era la última noche en la casa querían preparar algo esp
en la toalla mientras Drew y yo estábamos en la orilla frente al resto, con el agua cubriéndome
algo muy sensato por nuestra part
solo me miraron con una cara de "¿realmente has pensado eso antes de decirlo?" Y ent
tellas de vodka y una de tequila y nachos para
ez nachos traen pizzas
. -musité negan
¿qué crees que traerán
Una botella de tequila y una de vodka, para cenar seguro que compran
ones. El que acierte se lleva e
e dicho que vay
. Me lo debes por compar
. - Además, en mi defensa diré que
es ci
s opinar, er
ón. -dijo Jared estirándose
chicos. -dijo con un
chicos a la vez obviando el
que comenzaba a tener algo de frío, y me refugiaba en la toalla de Alexis
era lanzándose sobre e
.. -dijo Drew remov
anceando a Jared para que se despertase. Pero lo único que
dos chicas. Al notar que me coloqué a su lado él se acomodó sobre mi hombro, yo aún seguía algo nerviosa por el
tú no gritas
o prefieres. -dije co
oferta, pero e
po para resacas! -alz
ovia que como vuelva a gritar pienso ahogarla con un cojí... -y entonces antes de que pudiera te
se en el sofá con la voz totalme
a la cama, a Ángela le llegó
s volviendo la vista haci
y se lo enseñé a los chicos para que
ribió a mí. -dijo él sacando su teléfono y mostrándolo.
lo habíamos sido yo y Liam, ellas no tenían na
ellas también por los mensajes que ellos estaban recibiendo. C
East ni nosotros, es uno directo hacia ella. -comenzó Dre
ían esa parte de mí a parte de ellas dos y Alexi
de estos mensajes no nos ayuda de esta manera, s
esa persona sabe algo de lo que ocurrió realmente con Kian y Lex, y da la car
entido. -dijo Li
aron en mi dirección porque porque el timbre vino de mi teléfono. Desbloqueé
mismo
e? -pregu
s por hacer: cerrar el tab
tablero? -dijo Jude con el ce
ez se refiere a que tenemos que terminar con todo esto
ó Liam apoyando sus codos sobre sus rodillas
llar nada, mientras él se incorporaba de
s al cine nunca? ¿V de
con mensajes encriptados. -d
ni como ninguna otra cosa. Es una referencia. Cerrar el tablero y fir
era sabemos de quién se trata, ¿y si se refiere a que va a vengarse de nosotros? Tal vez quien nos e
ago de Drew y Liam y sabe cosas de ti, Ángela. Sabrá también que nosotros no t
Mark? -preguntó Vera
logrado averiguar algo más. Puso el altavoz para que todos
tros y ninguno me contestaba, si os tuviera delante yo mismo
pistados. ¿Has descubierto a
denadores de la biblioteca del East. Seguramente lo hacía desde a
dije yo total
ne a los chicos por toda la ciudad intentando encontraros y no precisamente para hablar. Ayer pillaron a uno de los
on una mirada tensa an
Nate? -interrumpió
ante textual. Algo de una lista de nombres y que el suyo estaba marcado en rojo. Se lo quieren quitar de en medio, y no es q
nos. -Vale, Mark. Si descubres algo más, sól
dme las llamadas cabrone
vemos
ono y la tensión
un camino largo y llegar de noche no es la mej
ge
para entrar juntas a clase. Casi nos quedamos dormidos aquella mañana, la noche anterior se nos olvidó programar la a
le de que quedaríamos frente a nuestra fac
por tant
ras del edificio, esperamos
ré llevando las m
ué
le he enviado nad
con la mirada. - ¿Qué hay de la historia basada en tú
yecto de final de curso
e, él no sabrá que se trata de
y ni si quiera sé de que voy a
ragedias literarias"? -interrumpió Vera
es much
quisieras
n libro como proyecto final sobre rivalidades en
erlo, tengo mu
de Dise
ro lo hará sobre mi
está, terminará arrancándose el pe
y Jude. -murmuró Liam
e querer morirse, a esto lo llamo yo un buen lun
- me quejé e
iblioteca de vuestra facultad, nosotros no podemos entrar sin llamar la atención de la gente, pero vosotras sí que podéis. Cuando terminéis las clases, podríais entr
s nada por probarl
no pueden pillaros. - avisó Liam
nte y llevando su mirada al moreno. - Somos l
Vera armadas con una zapatilla y una cuchara de madera intentando defendernos
igual que Jude. Pero simplemente nos dimos la vuelta y seguimos con n
ngeles de Charlie? -preguntó Ju
s a terminar con el mal y la codicia en el mundo. -dijo Vera con tono épico.
ex
lver tan pronto? -preguntó Jared m
bajé del puto coche ayer por la noche, pero
estar en la zona del East no era lo mejor en esta situación precisamente para nosotros.
a maldita broma..
ngo clase de gestión y economía ahora mis
o y extrañado. -¿Desde cuando
como hora para recuperar mis hor
e lo que se quejaban. Y entonces lo comprendí. Nate y Reed se acercaban hacia n
buscándonos. -dijo Drew con sorna una v
ncia entre ambos. -No estas en posición de vacilarme, Davis. Y sí, llevó unos dí
"vacaciones del puto pesa
Esto va a acabarse dentro de muy poco, porque os aseguro que es la ultima amenaza que recibo. ¿Qu
a que ver con la mierda de amenazas que te llegan, pero si que es una pena que no se nos haya ocurrido a nosotros ant
endiendo dar algún golpe por el cual yo ni si quiera me inmuté. Pe
n el jodido campus. Pero podríamos vernos las caras de nuevo, tal vez en e
a mirada con dur
n la jodida zona industrial y terminaremos con todo esto. Podéi
ge
habíamos quedado en hacer una vez terminásemos con
ez nos sentamos en la misma mesa de siempre. Nosotra
s el de los mens
yó entre nosotros por
, estudia en el East, por eso utilizaba los ordenadores
estaba utilizando y hemos podido averiguar su iden
taban igual de sorprendidos que nosotras en el mismo mom
ngún sentido... -murmuró
si quiera esta en el grupo de Nate ni en todo
que ver en todo esto no tiene algún sentido aparent
cualquier motivo para poder justificar aquello. Todos menos Alexis. Él apenas se había inmutado ante todo a
hora que sabemos quién es, podemos hablar con
rir, estará de luto. -dijo J
a enviarnos mensajes anónimos a nosotros... Así que dudo que ir a ha