Una tutora para el CEO

Gonz

ra. Observo como mi compañero se empieza a molestar ante las miradas logrando que se

grante, April González. — casi grita mi p

surro alzan

eo que será la maestra regular de matemáticas. —Ahora si nos disculpan, le enseña

ran así? — cues

rior son los preferidos de la trabajadora social, así que nos odian. — responde encogiéndose de hombros a l

raré. — aseguro a lo

oce acompáñanos a

endo que saque un gran suspiro. —Me siento cómoda con mis compañeros, pero

con gente, no soy buena entablando conversaciones y saber que voy a llamar a Doemenech me pone peor. Lloriqueo un poco, para lueg

ión para brindarles las tutorías a su hijo. Claro, es tal tal tal, perfecto le enviare el email y esperé su respuesta, que tenga lindo día. — vuelvo a tirar mi cabeza sobre el escritorio. —No

me dicen que tengo un nombre lindo, mi voz es hermosa, seductora y s

Llamo… suena varias veces y cuando siento que contesta alguien es el mensaje de voz. Cuelgo suspirando

n Dom

de gemir, no siento que me aprieta la polla por lo que significa que ha sido bastante usada. Le doy más fuerte haciendo que grite, le callo la boca t

re del cuello de la mujer, saco el condón de

jer respirando con dificu

abreado para mirarla de forma hostil a lo que traga con miedo.

scucho como empieza a limpiar y recoger. —Me r

ba de hablar de ella. Necesitaba sacar esa irritabilidad con una mujer, pero hoy nadie me ha zaceado sigo con lo mismo. Boto el condón y me visto, llamo al

somando su cabeza de pendejo, susp

vez. —respond

con su laptop. —¿No te gusto el regalo qu

dando un puño so

los treinta años. — lo miro con frialdad a lo que deja la laptop

con los negocios, necesito hacer dinero. —

ue te vi así fue

rake. — finalizo haciendo que se calle po

rias mujeres sin estar ocultándoselo, pero parece que estoy llegando al punto de cansarme de las

ros empresarios, eso si ellos muy bien saben que pasaron por mi primero. Se que tengo dos nuevas maestras jóvenes en el colegio de mi hijo, donde no

con un suspiro, escucho si

h? — escucho una voz familiar por la otra

ijo con arrogancia a lo que escucho como maldice por lo b

buenas tardes. —acepta

ra enviarle la autorización para brindarles las tutorías a su hijo y que la fi

pregunto con tono cu

nos encontramos ay

ertido a lo que escucho un chillido reprimido. —¿No piensas disculparte? —

voz alta. — escucho como se disculpa con s

arme? — vuelvo a concentr

gura, cosa que no es normal e

as. — cuestiono, por alguna razón mi enojo se es

e deletrear su email por favor? — cuestiono

do hoy? — respondo con otra pregun

ial, solo para pasar el tiempo. Pero no se preocupe como le respondí a usted así mismo le respondí a ellos. ¿Ah

otra vez respondo

l. — responde mientras escucho como escribe en su computadora. —Se

personal? — cuestiono sin poder creerl

en una compañía.

aya un silencio incomodo logrando que sonría. —¿T

acepte las condiciones y firme. Es el ú

lo estudie. — recibo un resoplo de su par

mi horario de trabajo. — res

lo que yo digo o me te

ará. — cont

escuche como traga en la otra línea. —Te llamo más tar

ivertido. Si, siento diversión cuando hablo con ella. Por igual cunado me saco en cara mis ver