Vendido al mafioso

cido, esto era demasiado provocador, Dios, los pantalones de cuero le apretaba mucho las piernas y trasero, estaba seguro de que si me agachaba se le rompería todo y ni

e enseñó un par de pequeñas capsulas. — la miró atónito, no creeria que iba a drogarlo. Sabía

mis cinco sentidos —le pidió y Jessy s

y le deposito en la palma de la mano las dos pe

ntó la azul entre sus de

s iniciales y van justo al grano, esto te ayuda mucho con el dolor. —¿Que no se asustara? Vio c

hora iba a hacer cruelmente violado. Se llevo su mano hasta su tr

a levantar el libido? Ojalá hubiera una, por que no, Liam no creía que pudiera con

quiero contagiarme de algo —dice preoc

k nos cuida mucho, no somos cualquier mujersuela que ves parada en una esquina, así que entre

tudio, como saben que yo no... —R

Serás un manjar para quien te escoja. Tranquilo, te cuidaremos. —Jessy sono como una madre que cuida a sus hijos, obvio una verdadera madre no seria capaz de venderlos de esta forma, pero tenía que ad

haciendo que se sentará en una silla, aún frente al espejo, pusó varias cosas en el tocador, todo era maquillaje, sombras

abía, como deci

do una sombra bronce con un tenue delineado en el lagrimal, los labios de Liam se veían aún más rellenos de lo que ya eran

risista satisfecha. —Si el está lista, estoy segura de que funcionará... Esta bien, en un momento bajos. —Jessy terminó de hab

show de las bailarinas daba inicio pero Jessy siguió caminando hasta llegar a la parte trasera del c

música era diferente. Mark entró sonriendo apenas miro a Liam, definitivamente era un omega hermo

ró curioso, ya que ninguna de los omegas presen

ojo y olor a manzana, parecía simpática y le sonrió como respuesta—.

gusto,

Dante. —Señaló a todas y las omegas asint

ás? —pregunto Samanta con tono enfadado

es n

lo había visto. —

—Liam miró a Mark quien estaba a su lado y este le guiño un o

sin paga. ¿No es así? —Mark rodo los ojos y miró a Sama

omegas se asombraron, Mark no era la clase de jefe que acostumbrará a regal

fiestas, solo hablan de trabajo y ni se diga de su líder, el señor Vance es un amargado de primera. Las veces que ha venido no ha escog

k dijo seguro y todas las omegas asintieron. Todo esto era nuevo para

s. —Tomaron asiento en uno de los sofás de colo

cia, tal vez ellos ya no lo necesitaban, debían estar acostumbradas. Hablaron de un Marco y un Vance, se pregunto

tar mas feromonas para ser mas atrayentes para los posibles clientes. Cinco hombres tomaron presencia, vestian trajes finos

torio del día de hoy. — El alfa castaño seña

o, pero Johan no respondió, canino hacia los omegas, acer

. Ya escogí. Lo quiero a el. —Johan la señaló sin soltarlo y giró para ver a Marco. Su amigo rodó los ojos y nego con la cabeza. Ahí est

o, el debe escoger primero

as formas y yo ya quiero disfrutar de mi chico. —Liam ri

s demás hombres que habian estado observando en silencio. Liam g

de

cerebro, para que al menos dejera de mirarlo tan ensoñado. Estaba estupefacto ante el hombre alto y fornido que se encontraba frente a el

ortante en ese momento y es que Alexander y Johan eran hermanos gemelos, los dos eran tan idénticos que lo único en lo que se distinguían eran s

ander observó a cada una de los omegas, hasta que sus grandes engranes

rá

En qué momento esto le estába pareciendo bien? Mark dijo que todos tendrían su paga trabajáran o no. ¿Si el era el afortunado? Penso alegre, pero todas sus esperanzas

es tu noche —Hablo Mar

ero volvió a retomar su andar hasta ella misma, escudriño su rostro, como si buscara algo en sus ojos. Estaba más cerca de él, por lo que pudo contemplarlo mejor, dando por hecho lo perfecto y guapo que era. Bajo a su to

ando —dijo

é?

torpeza caminó hacia él y puedo escuchar como Johan chasqueo su lengua, molesto.

gurarse de su presencia, se encontraba completamente aterrado. Y muy expectante, su fuerte aroma a café y tierra mojada no ayudaban mucho a su auto con

s habitaciones, donde podrían

e que el omega rubio entrara también. El pequeño espacio era lo bastante acogedor para ambos, la cama con una sabana de s

la mirada, era una regla estricta que tenía Alexander con cualquier omega, no po

ondió sin

itación, la cama enorme e incluso la ligera música no importaba en lo absoluto para Liam, en su mente sólo había lugar para una cosa y era que aquel alfa mal

ía decir que el aroma del alfa estaba muy encima del suyo, era totalmente normal cuando la omega estaba totalmente aterrada por el situación. Alexander puso su prenda cuidadosamente sobre la silla a su lado del tocador y se quedó solo con su camisa blanca y sus pantalones. Ahora se dedicó a quitars

ordenó con su voz gruesa, haciend

oso si no lo veía mientras se desvestía. Con las manos temblorosas se saco primero la ombliguera de organza y la puso sobre la cama, luego se dispuso a quitarse los pantalones de cuer

ntra su cuello y se paralizo cuando sus manos llegaron al seguro de su sostén, quitá

Liam. Lentamente alzó un pie y luego el otro para que pudiera sacarlo por completo. Estaba completamente desnuda, solo con las pequeñas b

rpresa, solto un ligero gruñido de satisfacción. El rubia sintió como las manos de Alexander quemaron su piel cuando acarició sus muslos, llegando hasta sus nalgas. Una corriente eléctrica

de sus bragas y Liam trago grueso—. ¿Por qu

quedarse estático, sin poder hacer nada. Hasta ese momento, Liam se da cuenta de que el alfa tenía el torso desnudo, sus ojos viajaron a sus abdominales marcados

explicó. El alfa suelta una expresión sorpr

a en que es solo sexo, como cualquiera que hayas tenido antes. —Desvió la mirada

Vance no escondió su asombro. Jamás se lo hubiera imagin

recibido —Alexander lo dijo en serio y con una chispa de entusiasmo—. Y yo seré

queños gemidos que silenciaron sus labios. Liam era muy inexperto, por lo que lo siguió torpemente. Alexander lo tomó por la cintura y lo empujo poco a poco hasta acostarlo sobre la cama, él se subió sobre el, sos

o decir cuando restriega su mi

to entre besos y en re

l cuello del omega, por un momento sus ojos cambiaron de color aún amarillo deslumbrante, se sintió extraño, por que ade

asta llegar a uno de sus pezones y tomar entre sus dientes uno de ellos. Trato de controlarse, era extraño que le pasara eso, pero la lujuria y las ganas de tomarlo como suyo lo insitaron a seguir. El omega siguió temblando so

n derretirse ahí mismo, poco a poco una sensación indescriptible se fue formand

te destrozandolo con su hermosura. Tomó con las dos manos la pequeña tela negra, y ella soltó un grito cuando las

o detuvo antes de que... ¿Que va hacer? Se pregunto, Lo miro con incertidumbre—. Te ha

Una sensación indescriptible empiezo a sentir Liam cuando el movimiento era mucho más rápido y fuerte. Alexander abrió más sus piernas para tener mejor acceso, y mira la reacc

dedo jugó el presemen en su cabeza, haciendo que se retorciera por completo. Todo eso era tan vergonzoso para el que tapo su ca

cuando te haga mío. —lo besó de nuevo, p

, acto que le hizo suspirar y poco a poco sintió como fue in

, haciendo que el dolor fuera siendo remplazado por una exquisita sensa

is. Estaba a punto de correrse o al menos eso cree cuando sintió unas contracciones rítmicas y placenteras en su interior,

sacándose los zapatos y luego bajando su cremallera. Liam lo vio expectante desde su lugar

a el tamaño promedio de uno, regresó a su posición anterior masajeando su prominente erección, y solo pu

tó un gemido

ocarrón mientras siguió bombeando su pene, y este comenzó a secretar pr

sonrió y la sensación de hacerla suyo y desearlo más aumento. Vance empujó poco a poco su pene, sosteniéndose con sus manos

e se detuvo. Liam pensó en que ya había entrado p

y sosteniéndose con fuerza de los fornidos brazos del

ar llamarlo por su nombre cuando

e besó el rostro como disculpa haciendole cosquillas en el proceso,

Aa

a moverse dentro y fuera, aún ritmo paulatino, ya no había dolor, s

do mientras arremetia contra su entrada, le encantaba com

an formando en su frente, su cabello revuelto y sus hermosos engranes negros mirándose lujuriosos. No podía verse más caliente. El rubio se sintió sumergido en un mar de placer

y empieza a moverse tortuosamente. Salia despacio y entraba rápido. El rubio arqueo l

favor! —

nso que iba a partirlo en dos. La sensación del orgasmo se formo nuevamente en su zona baja, haciendo que su entr

controlo... —El alfa dominante estába pidiendo q

orirse ahí mismo, los dedos de sus pies se doblaron tra

andolo fuertemente hasta que—. Hazlo, llega conmigo —Le

rarse y sentir la tibia esencia

mo beso antes de salir de su interior y recostarse sobre la cama. Ambos cuerpos estában sudorosos, agitados y to

—dijo el omega

ntadora y el volteo a verlo,

mbre de palabra. —Le guiño un ojo y le sonrió de nuevo.

bitación junto a el bullicio de la gente gritando. Alexander se puso de pie casi enseguida y se vistió, tomando la pistola que estaba debajo de su saco,

lo en peligro, las detonaciones se escuchaba muy cerca,

mos aquien buscan. —El alfa castaño miro atento a Alenxander y luego

ama miéntras Crusof y Alexander empezaron el intercambio de balas contra el otro bando. El omega pensó que moriría en ese momento, pero de un segundo a otr