MI LUNA.
a suspirar
ía aprovechar para hacer la tarea, ade
ste caso los rubios eran estúpidos
simo novio era muy bueno en la uni
s con la tarea,
tar y lo que quieres es estudi
sacaba Diego era porque era un genio, se esforzaba, o
sacaba buenas notas podía dec
cuándo Diego estudiaba,
rfa
ndo a otra parte, y Sam perseguía s
tá
cir que "no" a Sam, más aún si ponía esa cara y Sam s
area durante horas, hasta que
, aún más porque entró en su h
evantó del asiento, ya que estaba sentado en
nas
or respeto, y porque su familia y la de Sam se conocían desde
a con frialdad-Sam
sas palabras cerró
am, ya que eso sólo podía
n terminaron, ya eran las 14:00 lo
sas escolares y lo puso
vamos a
ado encima de
o levantar
la universidad pero como no le podía decir que no a Sam, termin
estás ha
ado delante de Diego, viendo cómo no
s de qué estoy hablando-di
en cómo este vago s
ería Diego, no tenía energías
xagerado,
vantarle, pero no pudo ni hacer qu
misma edad, a diferencia de Sam que era prácticamente un e
dolor muscular por levantar a un grandulón, ya suficiente ten
tas o te qu
sta vez se sentía agotado no sólo por haber estudiado durante horas, sino p
él se levantó de la cama,
ó sobre la espalda de Sam co
dame a bajar-
areció tierno a Sam, era como ver a
tá
más se lo debía por haberle ay
que era popular, y que quizás se lo hubiera arrui
él era más entretenido y cómodo pasar ti
dulón, llegaron al comedor y para la s
esayunaban todos juntos, pero en las tardes o en las
o hizo pe
uy mala
isa forzada, casi cargando a Diego
jeron ca
ndo algunos informes de su trabajo en el móvil, sin prestar
xpresó Diego, todavía tum
lo vieron, cada uno tení
ordar a cuando Sam era pequeño y estaba t
mirando su móvil como si no hub
e a Sam y Diego, se imaginaba q
sus manos en su boca, se comportaba igua
única que no agradó a S
con venas que estaban empezando a aparecer
queño la aterraba, aunque fuera Diego como part
hecho nada, solo se estaba apoyando en su espalda, no
a frialdad de Eva, aunque ya estaba acost
silencio al lado de Dami
sentó en
a uno tenía un
l, osea en el asiento que es
decir al otro lado de la mesa, desde
aba en el lado dere
cerca de Eva también, Blanca
enía diez sillas ya que en la familia había seis miembros, y a Eva
silencio incómodo, era
to con toda la familia, quería pe
aber hecho que Sam llegara ta
r, pero seguía sosteniend
con cara inexpresiva, metiéndos
no estaba satisfecho, seguía
o mucho, prometo qu
rdón de Eva, no quería que por su
a pasar porque Sam se tomar
ber oído mal, pensó que su madre esta
ás en seri
cástica sintiendo haber oído
o se quedaron en silencio por
so y todos tenían
anca en su silla de bebé, no le daba importancia
en serio-
cambiaron en absoluto, era una
ció en sus labios, dejó caer sus cubiertos en el suelo,
en ese mismo momento y sin darse
ho una montaña rusa, se levantó de su asiento y s
spera-gri