La Condena de tu Amor

a

o en los libros como en las computadoras —dijo Betty, mientras pasábamos delante de unas eno

edificio, cuando mi memoria dejó de recordar después del aula número mil. Lo bueno de esto es, que el últi

hasta aulas de música, arte y pintura, ajedrez, piscina olímpica, salas de entrenamiento de esgrima, campo

ste que fuiste animadora, ¿no? —preguntó

tencias en todos los años que estuve dirigiendo el

y dejó a Sahara en su lugar. La perra es buena en lo que hace —habló distraída, pero al darse

ño teniendo problemas, bastante ya tengo con lo que pasó hace do

igual le había dicho la verdad. No me interesaba andar

hay un mapa de la escuela muy detallado, fotografías del director y los profesores, con un pequeño resumen de cuál es su especialidad en la enseñanza. Cronogramas de los horarios habituale

bre las actividades realizadas. Pero también hay páginas que no son del control de la escuela donde se publica de todo, el que hizo el ridículo, al que le gastaron una broma pesada, ya sabes, lo normal en una High School de niños ricos, nosotr

pó de su auto, con la tal Sahara entre sus piernas abiertas, la sostenía del culo, bastante pegada a él y se daban un

provechaba los descansos de los chicos para ir a manosear a Alex. Era rubia, pero se notaba que no era natural, un cuerpo esbelto, pero muy

cando a ellos y

e se encontraba un chico bastante guapo y muy parecido a Alex, él que se había metido conmigo nada más entrar por los portones del estadio. Estaba recostado a una moto hablando con dos chicas—. Derek y yo también solí

en, que comprendí su dolor. Cuando llegamos a donde estaba Alex y ya gra

ol, mi novia Sahara. —Nos presentó. Extendí mi mano hacia la tal Sahara que no sé po

—Sonreí a r

u teléfono del pequeño bolso que llevaba en el brazo y se hizo una self

, eran tal para

por fin se alejó dirigiéndose a un descapotable rosa chicle bast

bía en el lado del conductor de su auto. Se notaba a tres m

era mi idea de d

endo que nos escribiríamos mañana domingo para poner

hablamos ni una palabra durante todo el camino, mejor así. Llegamos y Alex se ba

e, es

el chico al que Betty miró y llamó Derek, el gracioso, era el mismo que estaba en una de las fotografías de la pared y posaba junto a Alex.

la encontré haciendo la otra cosa que

su delantal favorito puesto, era amarillo con tomates rojos, regalo de papá, y aunque estaba

u nueva escuela? —Agarró una ser

a? No lo sé, ¿para prepararme? Ya que al parecer mi vida ya no

idado, lo siento. —Era cierto que ambas no habíamos tenido tiempo para nada en estos últimos días. Tocaba

mo a la que asistía en Boston —repliqué, un poco molesta por como tomab

Derecho, como siempre quisiste. David conoce al director y solamente con ver tu expediente fuiste aceptada, no tuvo que hacer nada porque eres una alumna estrella, mi amor. También Alex está a

lugar en Harvard que si estuviera en una escuela pública, y solo por esta razón dejé de discutir con ella y

etros de la mía, se podía escuchar claramente la música hard rock que tenía puesta

do solo porque el mío ya no aguantaba más y en cualquier momento me explotaba en las manos», del bolsillo lateral de mi vestido y abrí

la: campamentos, fiestas de disfraces y fiesta elegantes, Halloween, las graduaciones

za el lunes, aunque Betty me dijo que me ayudaría con lo que necesitara, tampoco quer

él llevando el uniforme de fútbol, sentado en el pasto verde del campo con las piernas abiertas y los codos recostados en las r

a él, en otras su primo, a veces juntos montados en el auto o en las motos que tenían. Fotos con el equipo de futbol, fotos con Sahara y

queño Alex en su espalda, como si estuviesen jugando. Ambos reían, una risa real de felic

de un padre te c

Alex estaba siguiendo mi cuenta, ¡vaya! No me lo esperaba, pero le devolv

seria y la fotografía en blanco y negro como si en su vida ya no hubiese color. Miré más abajo y en las fotografías de hace dos años salía en la mayoría con Derek, besándos

o hubiese existido en su vida, la mayoría de ellas eran de él con Alex y con el equipo de futbol. Al pa

untaría a Betty q

no traiga dolores de cabeza a mi vida, aunque creo que c

la

dad a esta hermosa historia de herman

genes hermosas de esta hist

en más cap