Ámame
aba su felicidad junto a él. Lo recordaba claramente y ese recuerdo la hizo sonreír, era
y uno muy atractivo. Sus ojos azules combinaban perfectamente con su cabello negro, era un hombre realmente guapo con un temperam
e su jefe estaba pidiendo desesperadamente. Ese trabajo salió rápido gracias a Da
oficina, Luz aprovechó para llamar a su esposo, quien respondió d
ió que ese hombre ya no era el mismo con el que se había casado,
lágrimas, esas lágrimas que corrían por sus mejillas y que
? Lo que haces no es pro
s Alex... tod
molesta—. ¿Es esta... la cuarta vez esta semana? Deberías p
ca, Alex se encargó de mostrarme que no soy suficiente pa
a repetir eso
mis abuelos —Luz dejó escapar un suspiro y respiró hondo con total incomodidad mient
garganta de Dante junto
udas que tienes, incluidas las de tus abuelos
do las cejas—. ¿Quién sería tan estúpido como pa
stidio como el retrato de un cuadro donde el
o y te daré to
ue ya estoy c
tás casad
ando el contrato sin rodeos, solo sabía que necesitaba un cambio y alguien qu
él y para cualquiera que quisiera hacerla sentir menos de lo que vale, le de
s las maletas y
edo irme así,
por ti y dicho esto, te quiero
er
quiero lista y sin p
s de que su figura desapareciera