El Despertar de una MAFIOSA
estruje mi piel y en aquel momento los recuerdos de Markos y yo en los servicios se proyectaron en el ahora y tuve que regalarme un poco de placer, me masturbe mientras acariciaba uno de mis senos... Terminé con u
bre algo y la curiosidad me
lado para vestirme, me retiré la toalla, busque unos pantis y un sost
mbrada a esto?— acaric
— sonreí y recosté mi cabeza en su hombro, su m
a 93— su voz estaba r
mi boca, luego de varios minutos sentí el sabor del preseminal y me detuve, este hizo un gran gruñido, yo busqué un condón entre las cosas que tenía en mi bulto, tomé a Manuel por un brazo y lo tiré en la cama, le coloque el condón, pude ver su cara de descolocado, pero me import
cara de satisfacción lo decía todo y qué
s y arregló su pantal
ñor Manuel?—
ué una pequeña reunión con los socios y necesito que esté
as, cabello oscuro, acento Mexicano y como dirían en su país, estaba rechulo el condenado, pero no es lo que quería, lo hic
uchachos me dijo sobre un gimnasio y fui hasta allí, terminé luego de u
llaman Rosa— habló la encargada de la co
an 93— seguí
es de
nezco a ot
sayunar— se marchó de la estancia, no quise ser tan distante, per
lista— esas fueron las
nuel— me p
os— camino
a desa
ostumbro a mascar tan temprano mi'ja— terminó de ar
quiero ver si puedes deducir algo de
bre, las cuales me imagino son seguridad. Cuando llegamos la cara de Manuel pasó de ser relajada a dura, serena, una cara de pocos amig
saludo y t
Javier— preguntó
tajante, el ambiente se volvió hostil, hasta el
sta convocatoria Manuel?—
siempre Marcos— Manu
aremos hoy?— pregu
nos quedamos a la espera de que dijer
os los presentes con deten
atención una de la mujeres presentes, la cual actuaba como si su asiento tuviera hormigas o cualqui
— esta se sorprendió ante m
ampoco, hablando por mí representado, esto es algo que si no lo
aritza tiene razó
ien o quienes nos está
ecavidos y reduzcan su personal de confianza y movidas, al menos ha
na; pasaron alrededor de 1h. Y llegamos a Colombia, específica
laboratorio, aquí tenemo
ienes buena mentalidad para esto— hablo
ñados se limitaron a tomar los tragos y el resto empezó a manosear y directo a la acción. Aquella escena me causaba cierta repugnancia, pero después de
uel hasta la choz
con lo de Maritza— le dió una última calada a su puro —ya nos vamos— lo apagó y se t
sobre el topo porque si la información está siendo filtrada de e
que esté bajo perfil, no sabemos si no está entre el
res y un amplio gabinete de enemigos que si por alguna razón llegara
os y a otra parte decirle de ciertas entregas y actividades que sean señuelos y así los mantendr
na en muchas cosas — en su cara se dibujó una amplia sonrisa —lle
ó anoche no tiene porqué repetirse,
más duro Manuel... más duro!»— estalló de la risa, no
jo señor
d funciona bien en ti, ya que de
ro que por abrirle las piernas al jefe me