Punto de vista de Charles:

Lo supuse desde el principio; cada vez que ponía un pie en la mansión de nuestra familia, me restregaban a la cara problemas sin resolver y luego terminaba marchándome en el peor de los estados de ánimo. No había habido una sola ocasión en la que me hubiera ido con una sonrisa.

Ya en el hospital, me senté en el borde de la cama de Rita y recordé lo que unos momentos antes había sucedido. Estaba tan molesto que de pronto sentí muchas ganas de romper algo.

Poco después mi celular sonó. Era un mensaje de Scarlett que decía:

"Ya tengo nuestro certificado de matrimonio". Tuve que leer el mensaje tres veces para asegurarme de que no estuviera imaginándomelo.

Este fue el mensaje de texto más ofensivo que había recibido hasta ahora. Luego hice clic en la fotografía que seguía al mensaje, la cual había sido tomada el día de nuestra boda y en la que estábamos parados muy cerca el uno del otro.

Mientras Scarlett tenía una de esas lindas sonrisas entrecerradas que ponía cada vez que se sentía encantada con algo, yo tenía el ceño fruncido como un niño que había sido llevado a rastras a alguna actividad que no quería hacer.

Ella seguramente se sintió muy feliz el día en el que se casó conmigo.

Entonces, suavemente pasé mi pulgar por su cara en la foto y me encontré cayendo en un vórtice de sentimientos encontrados. ¿Cómo había sido posible que una pequeña margarita alegre como Scarlett de repente se hubiera convertido en una rosa espinosa?

No estaba preparado para verla a salir de mi vida con tanta determinación.