icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Regreso de la Tumba: Recuperando mi corazón traicionado

Capítulo 4 

Palabras:1886    |    Actualizado en: 12/12/2025

ista de Bl

da. Mi rostro permaneció impasible, un lienzo en blanco que no reflejaba nada de la agitación que se arremolinaba en mi interior. El cáncer me hab

fusión, luego de irritación. Mi falta de reacción parecía frustr

llaves que estaba cerca, retorciéndose las manos nervios

ulló. Mi corazón martilleaba contra mis costillas. ¿Gabriela de verdad me

ca impecable atada con una cinta de satén. El vestido de novia de mi madre. Se

ndo con una alegría cruel. La arrojó descuidadamente sobre la pulida

oz goteando falsa dulzura-. E

icario de plata. El relicario de mi madre. El que Brandt había estado sosteniendo antes. El que tenía una pequeña ba

Dijo que era hora de que fuera para alguien que realmente apreci

Ese relicario... fue lo último que mamá me dio antes de morir. Un símb

ro ensanchamiento de mis ojos, y su sonrisa s

luminados de malicia-. ¿Querías

eaños. La sostuvo en alto, mostrándola por un momento, antes de que deliberada y minuciosamente, bajara su pulgar sobre la imagen en miniatur

ualquier patada. El rostro de mi madre, ahora marcado y arruinado.

uto-. Qué torpe soy. Como todo lo que tocas, Blake. Siempre

as, arrancadas de mi garganta. Fue un soni

a llenó la habitac

per. -Sus ojos, ahora ardiendo de triunfo, se encontraron con los míos-. Era débil, Blake. Igual que tú. ¿Y sa

cido a mi madre. Y me deseaba la muerte, el mismo destino que ya se cernía sobre mí. Un dolor abrasador estalló en mi ab

ada de rabia. Mi mano conectó con su cara, una bofetada

genuino miedo cruzó su rostro. Luego, se transformó en algo más, algo terriblemente astuto. Soltó un chillido agudo, un sonido diseñado para llamar

sangre brotó, carmesí brillante contra su piel pálida. Luego, con un jadeo dramático y una mi

-susurró, su voz apenas audible,

a máscara de horror. Vio a Gabriela en el suelo, la sangre, y luego a mí, de pie sobre ella, mi mano t

acia atrás, golpeando la pared c

adas de veneno-. ¡Lo sabía! ¡Sabía que no ha

o ardiente. Traté de hablar, de explicar, pero las palabras estaban atasca

uavemente, sus ojos abriéndose, enfocándose en

ébil, llorosa, totalmente convincente. Luego convulsionó dramáticamente una vez, sus ojos

jos ardiendo con furia protectora.

lo lárgate. Ojalá n

dre había pronunciado hace tres años. El dolor en mi estómago ahora se irradiaba por todo m

ros grabados con sorpresa e ira mientras contemplaban el cuadro: Gabriela, pálida y san

uñido bajo, desprovisto de cualquier calidez patern

n el brazo de Gabriela, luego mis manos temblo

. Un cañón suelto. Un peligr

ra de decepción, una emoción familiar que ha

traería caos. -Sacudió la cabeza, su voz pesada de desprecio-. Er

. Siempre me habían culpado. Siempre. Por la muerte de mamá, por mi fase rebelde, por las crisis fabricad

timo jirón de esperanza, el deseo desesperado y no dicho de que pudieran,

echo, obligándome a doblarme. Un dolor abrasador estalló en mi estómago, una marea de agonía que me robó el aliento. Mis rodillas s

Corriendo por mi barbilla, goteando sobre el impecable suelo de mármol. Un torrente. Mi cuerpo co

rostro de Fernando, generalmente tan compuesto, se aflojó por la sorpresa. Los

ue un susurro ahogado, un so

amudeó Corey, sus ojos sal

e se quedó allí, con una mirad

estómago, el dolor un infierno gritando. Mi ropa estaba empapada, pegajosa

esa y viscosa-. Siempre. Por todo. -Mi voz era apenas un susurro, irregular y r

mplazada por un terror genuino. Luego de vuelta a Corey, su rostro pálido, sus brazos todavía so

unda, un último intento desesperado de verdad. Mi respiración venía en

el destello de duda en sus ojos. Pero

do mi cuerpo, más sangre derramándose-. Una

l foco. Los rostros de mi padre, mi hermano, Corey, se desdibujaron en f

techo, buscando un escape-. Soy el chivo expiatorio. -Una risa amarga y rota escapó de

tí que caía, caía en una oscuridad profunda y sofocante, los soni

Obtenga su bonus en la App

Abrir