Cuando el amor llama a la puerta

zos. Al entrar en la habitación, aflojó los brazos sin piedad. Hester cayó tor

fuerza y no emitió ningún sonido. Al ver la t

nte detrás de Simon y parecían una pareja co

no. Cualquier hombre sabio podía ver a través

para salir de la villa. Pero ahora su decisión cambió tan

oco de incomodidad. Entonces Hester v

el botiquín de primeros auxilios, lo arrojó a

a desde que entró en la habitación. Pero parecía que estaba de mal humor, así que ella

aja de medicinas estaba un poco lejos de ella. Le

rrió hacia adelante. Cayendo torpemente hacia el sofá, su frente profundame

ó y vio a la pequeña mujer llorand

r era tan

te. Avanzando, la retorció con una mano que la sostenía, lo que

lo volveré a hacer. ¡

túpi

abrió directamente el botiquín y sacó los

de los labios de Terence. Cuando vio que Terence esta

espués de un momento de vacilación, ella d

stre?" Él respond

no tenía ideas, sintió un dolor agudo en las rodilla

ele

o más y lo miró lastim

sus ojos de alce, Ter

repente ser p

ente, él evitó que se moviera y contin

estaba sufriendo un gran dolor, todavía estaba conten

del ojo, parecía que sus pálidos labios fueron mordidos fuer

s los labios"

visto mal. Estaba cuidando la herida y ni s

uando no pudo soportar el dolor, agarró su brazo con fu

. Después de empacar cosas, Terence se dio la vuelta e hizo una llamada telefónica. A juzgar por la

echazaría a esa mujer. Además, él no aplicaría medicamentos a mi herida person

a los detalles, Sra. Qi le dijo que no se rin

elación familiar, ella apretó los puños. ¡No import

baja: "Bueno, hoy no puedo prepararte la cena, pero Mik

quería asustarla. Después de un largo r

demasiado tarde afuera. ¿Le ped

, él res

la atrajo profundamente. Frunció sus delgados labios en una

preguntó: "¿Por qué está

se han visto desde hace mucho tiempo. Es una

ontrar ninguna emoción extraña en su rostro tranquilo.

nados por sangre. Habrá más contacto en el fut

. Había venido a la villa a propósito para hacer amigos. Como esposa de Ter

as dos personas de su última generaci

io una sonrisa fría. Qué cruel fue ella

milia, él podría perdonarla. ¡Pero ahora sentía

a? "Preguntó irónicamente, pero olvidó que Hes

tida. Estamos a punto de cas

o por él?

peligrosos. Su rostro tranquilo

on un elemento terrible saltando por todo su cuer

era feliz h

pero no pudo alcanzarlo. Pronto se inc

rep

haciendo que la atmósfera f

uando vio el identificador de llamadas, sus ojos se cong

uchó la voz del teléfono, "S