La Reina del Vino: Una Venganza Perfecta
con Mateo a su lado. S
un vestido tan bonito? El rojo no le sient
Quiero de
ra me mira. Sol
esentonara demasiado. N
vierte toda su copa sobre mi vestido. El v
exclama, pero su voz
invitado
es nada, señorita
ero la mano de Mateo me agarr
evas. Qué
n el vino goteando por el suelo. El olor
otra vez.
Llevaba días sin comer. Estaba sentada en el polvo, fuera
en Mateo, de unos veinte a
quie
é. "Solo un t
ó y volvió con un trozo de pan duro. M
Ahora l
la vida. Por ese pan, firmé el contrato de servidu
le debía
fiesta, empapada en su vino
alvó. M
o un poco más. Decido aguantar. He aguanta
columna, observando. Su cara me resulta familiar. Es más mayor,
vi
ilia rica en Madrid. Trabajamos juntos un verano. Unos ma
ecio en su mirada. Hay a
enece a este recuerdo. No p