Una novia de mentiras para el millonario
le
arle celos a su exesposa? Y lo más absurdo: ¿con una mujer tan simple y sin clase como yo? Lo único que realmente lamentaba de aquella tarde era haber perdido la oportunidad de la entrevist
oble jornada para arañar algo más de dinero. Siempre me rondaba la loca idea de encontrar un trabajo mejor
ensar que él enviaría algo. Justo cuando estaba por cerrar
ntrato de
l contrato, no pude evitar soltar carcajadas. Cada cláusula era más absurda que la an
luego salió corriendo. Antes de desaparecer, me plantó un beso e
¿Qué te caus
sugargirl -respondí, aún i
que será un anciano de setenta años, pero ¿qué más da?
bra. A medida que avanzaba, su interés crecía. Su
té con una sonrisa irónica-. Es Marcelo.
erta, llevándose
stoy leyendo es perfecto. ¡Ni siquiera tienes que acostarte con él! Yo sí lo haría, está que se parte
joven, pero quiero lograr mis metas por mí misma.
empre te lo he dicho, tienes potencial para moverte en la alta sociedad. Además, solo será por un año... En ese
uspirando, haciendo planes
fícil aceptar estar con alguien que solo me quería para darle
Era como si dentro de mí se hubieran sembrado sentimientos que ni yo misma lograba descifrar. Pero él era un
e el dinero, ya mismo le diré que no -anuncié, d
ces, mi tel
en? -pregunté al ver s
no er
tía... y no tengo bu
en un instante. Un escalof
só? ¿Es
tenemos dinero para costear su tratamiento. Sé que estás lejo
ronaba, con la presión de la situación y el insistente eco de las palab
iré
respuesta
acataré todas tus condiciones
os, sintiendo cómo mi destino ac
mi futuro "jefe". Además de ser un hombre famoso, millonario y encantador, descubrí que no tenía treinta años, sino treinta y cinc
á solo jugaba conmigo. Ya no tendría un benefactor y, lo que era peor, tampoco el dinero para ayu
a un empleo. Dejar de creer en golpes de suerte y hace