Mentiras de cristal

entina llegó más temp

do encontrar el subtexto escondido, el verdadero plan detrás de cada frase. Sabía que no era solo un ree

. su princi

eco lejano del ascensor y el murmullo de los limpiadores terminand

l menos tres reuniones con clientes externos, un informe que entregar antes del me

recibió el p

structuraci

ección

lentina (Dir. Ma

da Val

las áreas de Marketing y Comunicaciones en una sola unidad de acción operativa.

undamentales en el proceso de transición. Te

lu

lás

E

correo tres veces

riel

iderar sin levantar la voz? ¿El que se había aprovechado de su ausencia cuando

as manos. Pero

a un enigma, y luego lo imprimió. Salió de su oficina con paso co

un error? -preguntó,

ía de años pero ahora parecía inquieta,

de Nicolás. Se hará oficial en

aron antes? ¿No era yo l

o la boca en una mueca diplomática-. Solo

Una manera elegante de decir: "te mov

más fuerza de la necesaria. Se quedó de pie frente a

era ca

a mirado. La había medido. Y ah

rueba, desplazándola lentamente, cortando su autoridad sin quitarle el título. Como si le

murmuró, más con d

bió un mensaje direct

colás

odés venir

a:

istente. Lo hacía él mi

tro estaba firme, pero los ojos ardían. Se alisó la chaqueta, recogió el cabello e

la vez ante

junto a la cafetera,

ció, sin leva

ne por

e del escritorio. La miró. Sonrió. Esa sonrisa

do leíste el cor

qué Ga

r qu

zgo. Ni siquiera tiene tu respeto. Lo us

bebió

el control absoluto. Siempre fuiste buena con el poder. P

ba de liderazgo. Es

una opor

unidad

ya no sos la misma mujer que conocí. Porque te juro, Valentina, si tod

ca que el perfume de él -ese que parecía igual al

s un juego

tomátelo en s

enc

cia la puerta. Pero antes

subes

, aún sin

s lo

solo. Bebió otro sorbo de café. En sus ojos no

a jugada solo par

o, aún no sabía si

morarse de su for