Atracción, irresistible, prohibida, fatal.

de las cortinas de la sala, creando un a

que su esposo llegara a casa. El sonido de la puerta abriéndose la sacó de sus pensa

u día? Llegaste temprano ho

que hablar -la voz

seriedad en el rostro de su esposa.

? ¿Estás bien? Ya

ce tiempo que no lo estoy -dijo E

os de su esposa y se inclinó hacia atrás, tratando de procesar

ué tienes? ¿Has ido al médico? -pregunt

o hondo antes

o, de verdad que sí, pero no puedo seguir fingiendo. Hay alg

uedó en silencio por un momento, trata

con su voz quebrada, a pesar de tener sospechas, n

o ser feliz, Francisco, -las lágrimas se asomaron en los ojos de la mujer

tratando de contener las lágrimas. Finalmente, se volvió hacia la muj

ja, ¿qué le diremos? Yo te

ro es lo mejor para los dos

sabiendo que su vida estaba a

ué tiene él? Te he dado todo, jamás te

en sus ojos. Caminó hacia un cajón, s

deré la custodia de nuestra hija. Es lo mejor para ella, Francisco.

ela, devastado, pero sabiendo que no tenía otra opción, pero algo cambio en él, en ese justo mome

que es lo mejor, lo haré por nuestra hija -resp

ibujó en su rostro mientras veía al hombre fi

á que mamá y papá ya no pueden estar juntos, pero que ambos la amamos más que na

voz de la mujer resonaba en sus oidos,

te despidas de ella y sea

deo sin pode

con que me despida

mentos, ¿crees que

de dos semanas. ¡No me puedes correr

o puedes vivir más bajo el mismo techo que yo. Ya eres

o! -grito

lágrimas de Estela se deslizaron por sus mejillas, dándose cuenta

rvicio para que fuera por su hija. Ainara corrió a

or qué tienen e

iene que de

rueso antes de

✧✿✿✿

ba pasando. Rodrigo caminaba de un lado a otro, inquieto, a la vez que mira

cuanto la puerta se

aces aquí? ¿No e

-la voz del hombr

do, como

hora? Es

so acariciar el rostro de su esposo, pero él se

he estado esperando de

i madre, sabes que no se ha se

go as

gue

ue sus pies no querían moverse de donde estaba. Sentía

studio de su esposo,

es e

drigo extendi

sintiendo como la tierra se abría bajo sus pie

vorcio. Ya no

re la hubiera abandonado de su cuerpo. Estaba en sho

» Se preguntaba

La idea de que haya alguien más en la vida de él la llena de una profunda tristeza y traición. S

o hijo, Mauro estará mejor contigo -esas

que fuera fuerte y que no debía llorar-. Está bien que te divorcies de mí, pero Mauro

única respuesta del

saber que su hijo estaba detrás de la puer