LA NOVIA FUGITIVA
lla estaba tan enamorada, los momentos al lado de su jefe se convirtieron en un romance, intenso
rio, a ella le encantaban, se acercó y las olió, su nariz absorbió todo su perfume y si
aún más hermosa, te he p
gracias personalmente, pero él ya estaba abriendo
entras ella se colgó de su cuello y sin más respuesta
in mesura y la llevó hasta
eces Amelia -Edward tomó un mechón de su cabello
do con alguien como tú Edward, eres lo que
l comienzo de todo era hacerle daño, había momentos en los que dudaba de s
ercó a ella y tomó su rostro a dos manos, la beso apasionado, la comenzó a acariciar, sus man
ba, pero su orgullo era más poderoso que cualquier sentimiento
nó, interrumpiéndolos de inmediato, se trataba
pero ese no fue el único momento en e
él ni siquiera se explicaba porque lo hacía, solamente tenía
po, y aunque él estaba con otra identidad, indirectamente le contaba lo verdad
z de la luna, ella miró al cielo y en
Edward le preguntó como si
esto! -res
?-él se acercó y le d
he pedido, pero no
nces dime, ¿q
o de su pecho, ahora estaba más confundido que nunca, pero no se desviar
..
te de Fernando , lo tomó por la es
o lo que te hizo?-Fernando le dio un b
erá el mismo día en el que tú y yo nos case
ió satisfecha, aunque ella no tenía nada
*
cado, reclamó su pedido y llegó hasta donde estaba Ame
celebrar nuestro quinto mes juntos -Edward
lo complacida y le be
excelente idea
os un pa
la primera vez que Amelia le decía q
que sentía lo mismo por ella, mientras que a sus espal
ciosa -respondió en
recioso lugar que él había reservado, una mesa para dos
cioso, no me digas ¿hi
mereces esto y mucho más, eres tan hermosa -E
eber, y ya estaba un poco entonada producto del efecto del alcohol, se desinhibi
enzaron a florecer los deseos, Edward por su parte pensó que era la op
seas mía, estos meses han sido hermosos a tu lado, per
espondió nerviosa, Edward sonrió encantado al escuc
e? -Amelia se alejó un poco de él, ella no
arme por primera vez en el mat
arle seguridad, sacó una cajita de su bolsillo, cuando la abrió, los ojos
irte algo muy importante, Amelia
ellos escapó un par de lágrimas, se abr
r favor, dime que esto no es un sueño -le suplic
osa realidad, te haré mía por siempre y se
cidad y el alcohol, Amelia se en
y delicado, hizo que la primera vez de Amelia fuera especial e inolvidabl
decoración, la fiesta y el lugar, todos ellos estaban llenos de preciosos detalles, era el día más importante de su vida, y
el gran día había llegado, aunque le hubiera encantado que sus padres la estuvieran acompañan
ue había hecho a su amor, no solamente estaba dispuesta a casarse con él
futuro de su nueva familia, las ansias la estaban consumiendo y la ilusión por esta
-el hombre que contrató para ser su c
o y las manos le temblaban, apretó el ramo de flores y el sobre. Con paso firme se bajó del auto,
había equivocado de lugar, y por supuesto de matrimonio, la iglesia estaba
os susurros de los invitados por ver ll
odo lo que había soñado se estaba convirtiendo en una pe
al darse cuenta de quien se estaba cas
ecesitas?-resp
se quebró por completo, mientras que
uerdas a Fernando Donovan?-Edward le dijo delante de todos los invi
sfallecer -¡No! ¿de
ndo Donovan, y si me voy a casar , pero no contigo-Amelia sintió un esca
o, no, no lo es>>
la boda debe continuar-esas fueron
era lo que estaba sucediendo, dejó caer el ramo junto con el sobre al piso, y una mujer desconocida, al ver su dolor, los
s puertas de la iglesia se cerraron, mientras que adentro la boda
ojos, eso sumado a sus lágrimas empañaron completame
e al cruzar la calle un carro venía, ella apenas abrió sus
erte accidente había pasado, todo el mundo salió corriendo al ver que quien e
ia aun no comprendía como Fernando Donovan le h