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Invitaciones peligrosas

Capítulo 3 III

Palabras:1738    |    Actualizado en: 13/12/2024

er ya era parte de ella. Fastidiada trató de cerrar la ventana de la sala ya que hacía mucho frío, al mismo tiempo observaba la oscuridad de la calle, fue así que dio cuenta de qu

l ceño-, Ha de ser Laura con uno de sus amantes –h

a confirmar lo que ya su padre sospechaba. Minutos pasaron pero nadie salió del auto ya preocupada quiso saber a quién pertenecía o porque estaba ahí. Algo que caracterizaba a Levina Zhang era la curiosidad de saber todo lo que pasaba alrededor,

nerviosa como para saber qué hacer. Aquel escalofrío nuevam

bonita te

deó por los nervios y el susto, se sentía tan cerca. Giró a ver quien e

con ella? De cierta forma no lo

usurró ell

aso t

a donde dormía su padre tratando de conseguir un abraz

ra a protegerl

trado su rostro ante ella. ¿Dónde se encontraba y porqué jugaba con

la casa o al menos se coló

ó una vez má

or la presencia espeluznante de un ser s

para no responderle con su singular sarcasmo que p

ta pero se entendía

e los pelos de punta y por los d

alguien desconocido entraba en su casa aprovechándose de

curría dejar las

er en las manos de aquel que

estupefaciente en mi vi

stinada a

niños. Soltó un grito al ver el cuerpo alto del hombre y corrió al otro lado de la cas

scapatoria, conozco esta casa como

r, el corazón latía desenfrenado mientras

–Preguntó aún

que no tenía 22 años

presa y entre más huyas esto se hará más excitante para mí, eres débil y no eres lo que

lardear de conocimientos o secretos que no p

qué está

s a negarlo?

furecer tanto que ni siquiera

do –Se atrevió a decir

as que seguramente la perjudicarían, cerró los ojos esperando un golpe por p

je ¿No es así? Quieres saber porque lo dije y

co? Se metía a su casa para deci

a de gente ta

untó después de u

te mueres por descubrir pero que n

é absolutamente tod

en rostro de él, era algo incorpóreo además de abrumador

que lo sabes –di

e divertido en su voz

Murmuró más para sí

evina supo que sonreía, no sabía que era esa c

rás noticias

más la golpeó hac

–Gimoteó con la poca va

, lo prometo –Juró c

ndome? –Preguntó

–agregó con voz sug

diabl

roso, pero por alguna razón se sentía curiosa de él y aquello era lo qu

diré es que mi

uesta y finalmente é

staba

escubrir los supuestos secretos de mi familia? ¿A cam

e la dejara en paz, Levina no sabía c

dónde provenimos ¿No? A lo mejor me agrades y te

l pretend

do? –Musitó su pad

menos ya no estaba tan sola, suspiró audiblemente dirigié

e aquello si ya había vi

o se giró una vez

a d

en aquel extraño tan alto e intimidant

tiemblo a

me atrevo

alma de

ientras t

uella no era la misma voz que había escuchado de él, est

l, había e

e paso eso Liv?! –

ior con aquel desconocido y como siempre que hablaban de algo s

esté delirando, a

o que ella

lgo a

esar que el timbre de s

estoy en problemas! Un desquiciado loco me pued

omo si le hubiese dicho la

resión con tu familiar, tu solo necesitas sal

ee insinuaba y se sonrojó d

bromeando, ella ha

ría lo que desconocía de su familia y si es que a

mbre y cómo hacerlo salir de su vida, lo que Levina no sabía es que las cartas

e un empujón al chico que se atravesaba en su camino, estaba fur

ue matarla lo antes posible, ella no era como otras víctimas

sucede

ra frío y nada alteraba sus emociones sin embargo últimamente e

blema, mantente

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