Atrapada por el mafioso millonario
li
día, hija mía -Papá
tuviera un duro día de trabajo. Él estuvo conversando
a la mejor cere
lé, abriendo la puerta de mi auto-. Y sabes que no hace falta que me ll
ta, no harás semejante barbaridad -Negó, en un tono agrio-. Contraté a un buen chófe
jos y ence
escogieron
ista a la playa y el atardecer es el mejor que se haya vi
re que su hijo se case ju
n el que sugirió la idea
r qué Ethan
aba con ansias el día de la boda. En cambio, yo estaba m
asarse en el mundo de los negocios? ¿Por qué la
eza daba tan
e calmé porque e
oco tensa -preguntó, quita
y, es todo. Solo necesito dormir
el vo
me estaba dando
er es de confianza? -pregunt
de malo -comentó, acomodándose en el asiento-. Además,
liviada teniéndo
a un taxista random para llevarme a la boda, teniendo
r sus decisiones, é
sina negra, ¿no t
gar a esos extremos? -Parpadeé
sto ese hombre tuv
ve
s ojos porque veía a un hombre familiar caminando por la ace
abriendo la ventana-. ¡Ethan! ¡Por aq
los días me estaba consumiendo poco a poco, y pen
palagoso e intenso... Siempre buscaba acercarse a mí y hablar d
a nosotros, papá le abrió la puerta trasera
quí -jadeó-. Tengo que admitir q
ranqué cuando la lu
te acostumbras a la ciudad? -indagó pap
o he querido usar el auto que me dio mi padre justo por eso -S
lados? Estás lejos de tu cas
no se han ni casado -reprochó mi padre,
los
en ese sentido, papá -Arr
niño, pero al salir y explorar los demás locales, terminé ol
odo lo que yo le pidiera, sin ningún problema. Er
sp
staremos encantados de recibirte -
ar problemas -Él ne
rte un problema para nosotros, Ethan -
amos
Una cena debería de ser algo normal entr
o, aceptar
legamos y estacioné el auto cerca de la entrada. Al bajarme, lo primero
e mi madre estaba
veo que trajeron a
an dejó encantados a mis
la ca
ontrado a Ethan de camino -inquiri
eguntar, ustedes vayan al c
o mis brazos porque fue un día pesado, como de costumbre. Era difícil
aría s
nos sentamos
rque ya tenemos todo listo -Juntó a
más contento
naba ese vacío en mi corazón. Tenía que mentalizarme que con e
ternura-. Me voy a casar con la mujer más hermosa
e
onoces muy bien,
o del mundo para conoc
a a crecer -señaló papá, con picardía-.
ía falta m
ateando su pie por
ó él-. Tengo más de cincuenta, Li
oportar la vergüenza. Mi padre no tenía pe
o -balbuceé,
e los problemas -
s que no me imaginaba teniendo