Melissa
ua
era sacudido, me hizo ver que lo que habÃa vivido hasta hoy no se podÃa comparar con el sentimiento que estaba empezando a sentir por ella. Sé que está mal,
enÃa ese lápiz en los labios, moviéndolo hacia adelante y hacia atrás, mordiéndolo, me volvió loco.
e sorprendió fue la fuerza de esa mirada, que me hechizó, el destello de ira al ver que
studiantes se fueron y yo comencé a empacar mis cosas. Un pensamiento nunca sale de mi mente: ¿soy un pedófilo? ¿Un pervertido por gus
iño. Los estudiantes se dirigen al patio y yo me dirijo hacia la sala de profesores. Muchos profesores ya están aquà y noto las caras de algunos profesores tan pronto como entro. Sin miradas
poco. Me siento asfixiado por las miradas. Por supuesto, hay otros profesores en la sala, pero algunos es
lo y noto que las aulas y la escuela misma están muy bien decoradas. La propia escuela está decorada con trabajos de los alumnos, hay todo tipo de trabajos: lib
ola
o. ¿Me interpon
o, madre. Ahora es
do a alguna c
mp
nocÃ. - Suelto,
maldigo pensando por haber dicho algo. No puedo decirle que estoy encant
do comentar so
¿por q
spondo frustrada. Oja
. Dime una cosa: ¿es herm
gel -comento sin pestañear y sin dar
mi madre y me quito e
a ponerme el celular en la
ida. ¿Estoy realmente enamorado? Ella me
mente me conmueve. Respondo sin sab
a quién crees que
case pronto. Y eso. E
Otra cosa, seguro que
te gustan estas cosas sobrenatura
ando -responde. Soy yo quien lo sabe. Sigue tomando cartas de todo el mundo y,
ombre de nuevo? Creo que es Gabi. Ni siquiera le doy tiempo a mi madre a contestar y cuel
recho, pero hacer lo que ¿Y si esta chica se mete conmigo? Me dirijo hacia su mesa y