Prohibido Amarte

er algunos asun

fingiendo sorpresa

me con Grace, pero no creo pod

ancia, aunque este molesta—por favor Aidan, lo ves todos los días sin falta y Grace se irá en unos días.

no comiences con

, Aidan? Crei que ibas a madurar con este asunto, que amabas lo

tendiste?—le dice su hijo disgust

ersación qué, cada vez se torna aún más interesante, es como ver

ido en la vida ¿Y así lo agradeces? ¿Comportándote cómo un ordinario mujer

seguir es

nombre con verda

señora Mitchell y a Anna, quien no está muy lejos de ahí y

rodear por el jardín lateral porque mis botas, tal cual s

hijo, un mujeriego y mantenido que derrocha el dinero de su familia con un tal Kilian y que probablemente ni siqu

as botas de plástico y la gorra, necesito un poco de agua, aunque el sol no ha tocado ni un

enfrente, al ponérmelos escucho un a

stiona una voz feme

n se fue hecho

me un poco me doy cuenta de que se trata de Philippe, uno de los chóferes—he vist

ado por su cama-se

illo, rápidamente todos los que se habían reunido sobre la isla d

staculiza la puerta por la que deduzco él entró, los chófer

, pu

dan—acusa Mackenzie haciendo acto de presencia, no me di cuenta d

para chismes?—interpela—¿Les parece bien

fombra, pero conozco a qué salón se refiere, mi

irección, me mira de arri

impiando la orilla de

agua—me excuso agachando la mirada, quizás s

llegaran las invitadas de la señora y no tiene caso que te quedes si no realizas bien

a antes de mi hora de salida es la gloria, una pantalla plana con más de 200 canales y todo un gabinete con gaseosas y comid

es pesado y mucho menos tedioso. Todo tiene un intenso aroma a pino, pero no es molesto, de hecho

onde han caído. Voy a la cocina y tomó todo lo que necesito para un día entero de películas, p

sante en la televisión de medio día, pero por casualidad encuentro una película s

lta y cuando abro los ojos v

del sillón, sin darme cuenta de que mis p

vo la mano al cuello, me duele, seguramente dormí en una muy mala posición durante

a a comprobar lo que he visto antes, afuera y

s s

spués de un segundo me doy cuenta

sa abrigadora, una extraña bata rosa de ositos blancos y unas pantuflas de garras color mo

n un vaso y saca de la alacena un frasco de galletas. Tom

tes de subir el primer peldaño—cambie e

do ahí, pero hasta yo sé que cambiar el turno es imposible

dan ofrecerá una—resopla como si la noticia le pesará—pequeña reunión con sus amigos más íntimos, así que tú estarás en el t

que yo no

quier

uniones, el joven Aidan—o mejor dicho el asqueroso Aidan—p

ta conocerte, solo haz lo que te pida en caso d

o, p

a bañar que tienes palomi