Mí vientre al Ceo

a y la bebo de un trago, el por suerte hace lo mismo. Él comienza a servirm

aemos de bruces al suelo. Me rio con mas fuerza, no esperaba que un encuentro as

ura y dice:—Lo lam

o, lleno de humedad y ansias, también de sufrimiento, porque estoy vendiéndome a

haciéndome gemir. Ni siquiera yo sabía que podía gemir de esa manera, nun

ón dejándome indefensa de la cintura hacia arriba. Me cubro los pechos avergonzada, es la primera vez que estoy asi frente a alguien. Ni

as palabras, yo asiento, aun mas borr

apso. Nunca había sido besada de esa manera. Lo tomé del cuel

y no pude evitar

lam

llegaron al valle de mis senos, haciéndome estremecer. –Bellos pechos – comen

iera congelado el bonito trasero, aunque aún no lo veía. –Quiero ver tu… tras

n trasero y menos tan redondo. Mis mejillas se volvieron rojas, pero ya era tarde, también toca el mio. Sus dedos curiosos

é una chica rellenita, pero el me tomaba entre sus brazos, como si fuera una pluma, sin pr

ompañante, quien ya estaba sopland

¿dije eso e

si hazlo –mencioné con prisa, el sonrió par

ía aparecer peluda y virgen frente a un desconocido,

tros de d

ó Brianna, dejando la taza de café a un

vie

onito – sus palabras me dejaron dudosa, pero cuando

sas que no tienen bolsita, y no tenes que preocupar

no lanzar todas las groserías que

impulso pero… se sentía jodidamente bien. Nunca había sentido que alguien me tocara de esa manera, y esas

torciéndome, nunca hab

–me interroga, se sienta y

hacia abajo. Cierro los ojos cuando vuelve a besar

… exqu

zcochuelo? –bromeo y

regunta y me penetr

baja el pantalón, dejando ver su enorme miembro, me aterré. ¿Alg

ultando mi vagina detrás de mis b