Ex esposo paralítico
sa dándome ánimo, abrazándome nuevament
ez que me sentí relativa
osa, pasándome un pañuel
ondí. Melisa se
to, ¿o bueno
endo. "Melisajeras, como para
o, como te lanzó a los leones
yo no quiero las
ianna. Eduardo, a pesar de todo, te ha lastimado. Lo
rees tú, pero no lo sé. Siento que tu felicida
azada", dije. "Ya tuve un bebé, estuv
relación así. Se están volviendo tóxicos. Tú no quieres soltarlo y él parece que se la pasa de
ierto", resp
uando eran novios? ¿O me vas a decir que te has olvid
s razón", comenté. M
e tu relación con Eduardo, que
ntigo es porque se da cuenta de lo mu
y también reflexionaré sobr
ga, porque estoy preocupad
o. Intenté conciliar el sueño, pero no podía. Estaba preocupada por Eduardo y, por má
punto blanco; pasos torpes. Penetró en un portal limpio y elegante y subió despacito las escalinatas de
aba, dando saltos, hasta su amado esposo; miró en torno con compla
e quedó observando la computadora, sin prestarle un ápice de atención. Ella, levantó
eró, pudo contemplar su sombra inquieta por el rabillo del ojo. Poc
scucharla; la misma sonrió. En forma precipitada, se
procurando no darl
te amo -dijo de la n
tá
preguntó de repente -s
e hablemos
e Brianna. S
te -comentó con una sonrisa radi
escúcha
o hacia atrás, sin entende
es vale, t
quiero est
tó pensando habe
e escuchas y además:
a salieron de sus órbitas. No podía llega
so?, no puedo lle
a vista -Eres... de las persona
ntiendo a qu
como tú. Ya pasaron tres años de nuestro matrimonio, ahora te quiero fuera de mi vida. Así que te voy a pedir el favor, en cuanto salgas de
eguro es un
saliva en seco, bajando la vista y sintiéndose en e
tiendo qué me est
contigo!, quiero separarme,
eguramente que es una broma. Estamos b
iempre fué una mentira, y la verdad es que quiero volver a
a verdadera razón por la que me estás dejando -dijo
untando por qué te dejé..?, puedo enumerar las razones, pero por ahora no. Me
d me estás diciendo que te es
ero hacer una vez salga de esta puer
nte se puso de pie. Se dio la vuelta, d
e? -repitió él, su e
y él simplemente la dejó marchar dando una ri
te con prisa, sin poder llegar a comprender
eja caer su cuerpo en la puerta, el suelo se mueve ba
a sido un sueño tan real y