LA ORQUÍDEA OLVIDADA

IS

titud lo encierra y ninguna indi

decó de elegante plateado. Dentro el edificio mismo de alfombras persas cuadros de vanguardia y alta tecnología hervía como una colmena en plena actividad gr

mirando la pantalla de su computadora sin gafas algunas y frunciendo sus labios delgados pintados de coral en un gesto de concentración propio de ella. Mae podía detallar de memoria cada detalle de sus empleados incluso sus gustos culinarios, igual había con sus representados y más minuciosa era aún con los productos a representar. Respiró hondo entrelazando sus dedos. El aroma de “Orquídea Salvaje” inundaba si despacho. Un gran logro su secretaria la requirió por el intercomunicador. Raymond Whitfield la buscaba, había dejado un par de mensajes para ella suficiente ya para acortar el suspenso. Mae le pidió que le dijera que estaba en

ea en su secretaria- o en una mujer a quien le latiera el corazón aún- cuando estaba frente a ellas un individuo como Chandler Forrester.

varonil; no era fácil perder de vista ese joven frente a cualquier cámara en especial por su carácter . Mae apodaba Luis por sus caprichos el Rey Sol aunque ya parecía al rey Midas, él se vengaba y llamaba aquella oficina Venecia por lo excesivo de sus ornamentos a veces, tallas de marfil, dorado y

necesito de combustible!- f

rnó los ojos y tamborileo los dedos en el borde del es

perseguía, el corredor de rally, tal vez la culpa era de su propio organismo . Chandler sin desdén alguno se encogió de hombros, pa

le mencionó a Raymond el director más afamado en Europa

regatean hasta llegar a lo que mereces así

una malic

que eras

n no se descubre todo el dinero que poseo, no solo en activos. Como sea…. México me puede resultar divertido , firmar el spot luego de p

o perfume más visible, él sería el vocero de la línea masculina la cara visible aunque no era un término corpo

arreglo floral, al primer esposo de ella le fascinó esa flor, el millonario consultor de finan

nzó este perfume más que una estrategia comercial. Lo menos costoso de

conocerla Chandler regal

erdad me cree

ándalos nadie lo sabría – tal parece que se lanzará como presidente en las internas de su

dijera algo , el se mant

amable para variar …te doy luz verde.-

vas, le daba permiso? Para qué? Él dejó a un lado su copa hacia y la besó

s en la cochera que aún debía de terminar de pagar , una moto canjeada obras de arte. Incluso en la baulera tenía espacio de sobra. Había una caja fuerte oculta y el vecindario era tranquilo, discreto para él, un par de veci