Una Mamá Suplente

onquistará a ese niño, no le i

miga; quien se encuentra sentada en el sofá bastante impacie

mucho, pero no puedo pasar por alto mis compromisos. —Toma su bolso de mano y le da un beso en la mejilla—. Después t

a que hacer sin ti —le dijo

, comenzaré las prácticas y no puedo hacerlo más. —Emily mueve su cabeza afirmando—. Te quie

ella deja sus cosas y va directo a ver a sus abuelos. Al ingresar a su habitación se da cuenta que se encu

encontraba feliz por haber encontrado este trabajo, llega a su cabeza el recuerdo de aquel hom

ó bastante apresurada, al ver la hora, notó que de nuevo estaba con el tiempo justo, c

le envió un mensaje a su amiga, para que ella no tardara en llegar. Al llegar a la casa, ella bajó y c

n medio de la sala llevando su mirada de un lugar a otro, hasta que una mano sobre su hombro le dio

rde, me puede decir ¿qué debo hacer? por favor

nvenza; la única persona con capacidad de hacerlo cambiar de opinión es su papá, pero el dia de hoy salió m

ugar de su habitación —As

obijas y completamente decidido en quedarse allí. Emily resp

bos; él solo quería ver a su mamá, que aunque muchas veces ella

, me gustaría saber ¿Por qué no te has levantado? —Él cierra sus ojos ignoránd

u dedo índice en el mentón de Liam y luego estiró

ra poder jugar y cuidart

ue las otras niñeras solo le exigían obedecer, mie

es e hizo algunas imitacio

, su tierno rostro cautivaba.

sto para salir a estudiar y lo mejor de todo

mano, Emily llegó en un momento vu

cuales provocaron en aquel pequeño unas cuantas risas más, se notaba que quería tomar su día libre solo para jugar c

e abrazo y un tierno beso en la mejilla, sonrient

ue la tarde para seguir jugando cont

vida fácil al estar ausente su mamá y de alguna forma su papá, la curiosidad de Em

ía mucho por hacer en su ausencia para que cuando re

espera en esta empresa, no ha podido pasar por alto que estará sucediendo en casa, pensando que su hijo no salió de su habitación, t

se capricho de querer tener al lado a su mamá, lo tiene en ascuas. Una mujer como Isabel nunca

que su mamá se haya ido; a su corta edad no puede pone

us cosas para ir a la casa, pero lo detu

oah dijo en

sucede es que la nueva niñera de

uiera, él se sentó

—habla con su tono

ah, al verla entrar sola. El tono radiante en la cara de Emi

en el fondo pensó que él no confiaba del todo en ella y p

contraba con ust

unos cuantos pasos acerc

e sea pronto que no soporto la ineptitud. —Ell

e ya había sido recogido, supuse que se trataba de usted quien lo habí

a mi hijo le suceda algo, lo pagará muy caro... —Noah fue directo a la silla y tomó el saco para salir d

stentemente, mientras su respiración

el de ella, notando como sus palabras hacen que

r a su hijo. —Él se detuvo y dio vuelta q

que voy a tomar medidas legales por descuidada, estoy más que seguro que lo irá a lamentar por el resto de su vida. —Al dar vuelta él se

as que todos allí bajaban sus mira

uchando como las personas murmuraban. Lo único

tor que lo llevara directo al colegio. Allí le tendrán que dar respuesta exa

edir permiso al guarda, el fuerte enojo que sentía estaba saliendo por cada uno de sus poros; ob

a tan abrupta en la que ha ingresado —habla l

cuentra mi hijo y a quién se lo ha e

ntiendo cual es el problema —al e

no lo podía volver a recoger, hasta pronto. —Salió él de allí con destino

no lo iba a tolerar; mientras que llevaba la mirada de un lugar a otro a través del v

se encontraba saliendo con su hijo en una mano y una malet