icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
El Chico Dhall ©
5.0
calificaciones
322.5K
Vistas
58
Capítulo

Es verdad que todas las lobas quieren un Alpha, también es cierto que cualquiera daría lo que fuese por estar con uno, pero yo... No me considero de ese montón por tres simples razones, que son: 1. No creo en los típicos clichés. 2. Todo ese rollo de ser luna me parece aburrido. 3. Simplemente no me gusta nuestro próximo Alpha. Yo soy Jexi Dornam, la única chica de la manada que odia a nuestro queridísimo "Elián Dhall" o como yo le digo "El Chico Dhall".

Capítulo 1 Prologo

Prólogo

—Jexi, ¿qué harías si un día empiezas a sentir ese olor característico de tu mate y al verlo finalmente sea el Alpha Elián o tal vez uno de sus hermanos? —mi mejor amiga Quero camina a mi lado por las instalaciones del instituto.

Alzo una ceja y remango mi bolso a la espalda, acomodo mis lentes de aros y me dispongo a hablar —Sabes perfectamente lo que siento por ese idiota y no es más que odio — llego a mi casillero y lo abro para dejar los libros que no necesito —¿qué lo defendería con mi vida de un ataque? Pues sí, lo haría, pero solo porque es el Alpha y nada más.

Recuesta su cuerpo en los casilleros desocupados —sinceramente no sé porque lo odias tanto—habla —pero eso no me importa, siempre y cuando me digas que no te gusta su hermano, Yannick —suspira y posa las manos sobre su acalorado rostro.

A ella siempre le ha gustado Yannick Dhall, y desde que un día él la salvo en plena cancha de un pelotazo en la cara, ella, lo ha amado mucho más. Tiene hasta una carpeta en la galería de su móvil con más de quinientas fotos que ha encontrado en Internet.

No es broma, pero siento que lo peor de su obsesión con él fue cuando este terminó su último año hace un par de meses atrás.

Lloro por tres semanas enteras... En fin.

Cierro el casillero luego de dejar los libros y me encamino al aula. Sonrío —Ninguno de los dos hermanos Dhall me gusta, tampoco creo en los clichés que me dices, por lo tanto... Es que sabes que soy así —me encojo de hombros.

Quero pasa su brazo delgado por encima de mis hombros me me atrae hacia su cuerpo —¡Ay, mi querida mejor amiga! —junto mis cejas ante su tono suave y burlón al mismo tiempo —los cliché existen, los chicos lindos existen, —me da una mirada rápida con una sonrisa —así también como el dicho que dice: —levanta una de sus manos al aire — "Del odio al amor solo hay un paso".

Ruedo mis ojos y sonrío —Sí, claro.

...

Seguir leyendo

Quizás también le guste

Otros libros de Marian Gallardo

Ver más
Capítulo
Leer ahora
Descargar libro