Mi Hermanastro Mi Tentacion

-Una chic

rad

opa con su dedo, se mantenía sumergida en sus pensamientos, mientra

ses en un funeral -Golpeando el costado de su cuerpo, Fiorella, su mejor amiga, intentaba

fue una reservación de hotel, a la que asistió con Melanie -Dejando que la tristeza se reflej

ad que en el fondo Ginebra sabia, pero que no quería aceptar -Es tiempo que quites esa cara, y por esta noche celebres, no todos los

forma de saludo, y rodando sus ojos, esta soltó una bocanada de air

mujer de un solo hombre, y tú, mejor que nadie, sabes que ese es Brian -La chica bufa a

en razón -Entiendo que él es el único hombre en tu vida, el primero, a quien amas, pero no es bueno estar atada a alguien que no te

apoyo incondicional, y retomando la ronda de tragos, dejaron

bres de la barra, quien parecía muy interesado en un par de féminas a

visto frecuentar el lugar -Sin dejar de mir

ue están buscando es un poco de emoción -Haciendo un gesto con

orma de complacer a una de ellas, quien cubría su cuerpo esbelto y delicado con un una falda negra y una blusa bl

a hora -Pensando que este no lo

a la hora, sino que me la llevó de aquí

s manos, y el par de ami

la, eso no había pasado desapercibido, ella era una h

ro hombre, que se hallaba en la barra, Fiorella le susurro a

do la vista a su amiga -pero yo no estoy

fiel a Brian, la mujer se negó a

perdona, vaya

s, así se fue acercando hasta el joven de la barra, que se hallaba en medio de la pista disfrutando con su compañero. Le

ó el muchacho, que parecí

oltó del agarre de Jordan, pero casi vuelve a caer

e te lleve afuera, para

zco, como para

un poco de aire, para que se te vaya el mareo o puedo soltarte

do. Así que asintió con la cabeza y se dejó guiar hasta fuera del edificio. Una vez fuera, aspiró un par de bocanadas de aire, como si

está mejor

a que haber sido tan grosera c

por tu bienestar, nada más, ahora que

ero se dio cuenta de que no y que, aparentemente, sí, su único interés, era que estuviera bien, así que una vez que se despejó, volvió a entrar a la discoteca. Trató de bailar

s mejor, de

penetrantes ojos del joven, que le ha

acias, pero aú

necesitas

río, era la primera vez que le sonre

en los mejores cafés, para q

io -le sol

omar un café? ¿O estás pensando otra cosa? -le dijo, acercándose pe

e no, solo te

aclarado, ¡vaya

stró fuera de la discoteca, paró un taxi y prácticamente la tir

Hilton,

-preguntó el

es cafés para la resaca, pero si no

, sí, s

o mientras se mord